El gigante de la industria del café Starbucks dijo este miércoles que cerrará algunas de sus cafeterías tradicionales en Estados Unidos y Canadá y apostará por abrir tiendas de servicio express, como parte de sus reajustes ante la “nueva normalidad” provocada por la pandemia de COVID-19.
La empresa prevé una pérdida de 3,200 millones de dólares en su tercer trimestre fiscal, que finaliza el 28 de junio, y una caída de los ingresos operativos hasta 2,200 millones.
Además, espera una caída de 10% de las ventas en Estados Unidos y un desplome de 20% de los ingresos en China, sus dos principales mercados, en todo su año fiscal, aunque con una recuperación en el cuarto trimestre.
Las acciones de Starbucks caen 3.79% en Wall Street a la 1:20 p.m (horario de México), su peor día desde el 1 de mayo, y se venden en 79.25 dólares.
La compañía planea renovar o cerrar 400 cafeterías en Estados Unidos y Canadá en los próximos 18 meses y por cada tienda cerrada abrirá una ubicación alternativa, especialmente en áreas urbanas.
El objetivo de Starbucks es abrir entre 40 y 50 tiendas con servicio exclusivo para llevar para cumplir con las medidas de distanciamiento social recomendadas por las autoridades de salud, ante los temores sobre una segunda ola de contagios de coronavirus.
“Estamos mirando hacia el futuro (…) Hay muchas oportunidades para reposicionar estas tiendas en este momento”, dijo el CEO de Starbucks, Kevin Johnson, en un comunicado a los inversionistas.
“Con cada semana que pasa, estamos viendo evidencias claras de la recuperación del negocio (…) La marca Starbucks es resistente, la afinidad con el cliente es fuerte y creemos que el período más difícil ha quedado atrás”, afirmó.
En la actualidad, la empresa cuenta con aproximadamente 10,000 tiendas en la región de Norteamérica.
Desde la irrupción de la pandemia de COVID-19 en marzo, Starbucks se vio obligada a cerrar sus tiendas, aunque ahora están abiertos alrededor de 95% de sus locales en Estados Unidos, a medida que más estados permiten la reapertura de negocios.
A pesar de ello, los consumidores muestran señales de evitar comprar en las tiendas y optan por los servicios de entrega rápida.
Hasta este martes, el número de contagios de COVID-19 es de 1.9 millones en Estados Unidos y más de 98,000 en Canadá, de acuerdo con cifras de la Universidad Johns Hopkins.