La petrolera Royal Dutch Shell busca depender menos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y aumentar hasta 15% su participación de mercado en el país, desde el 1% actual, de acuerdo con Bloomberg.

Tras adquirir 11 bloques en las subastas de petroleras, Shell espera producir petróleo en México.

La compañía buscaría transportar el combustible al complejo de refinerías Deer Park, Texas, en la Costa del Golfo de EU, para su procesamiento y posteriormente lo vendería refinado a los consumidores mexicanos. 

Además, la firma angloholandesa planea importar más del combustible que vende en México pese a las medidas del gobierno federal que ha retrasado el proceso para aprobar permisos de importación de combustible. 

El plan de Shell para aumentar las importaciones de combustible se basa en la apertura este año de dos nuevas terminales en Tuxpan y Tula, propiedad de Invex.

A través de este esquema, transportará su producto en barco desde sus instalaciones de Deer Park, una empresa conjunta entre Shell y PMI, el brazo comercial de Pemex. 

No obstante, la falta de infraestructura energética de México y la incertidumbre del mercado podrían obstaculizar que Shell logre aumentar las importaciones. 

“Tenemos que echarle un vistazo prácticamente cada mes. Pero pueden estar seguros de que vamos a aumentar la oferta”, agregó Fonseca.

Además, la firma prevé una inversión de 1,000 millones de dólares para los próximos 10 años y asegura que para 2020 esta será mayor a la realizada en el año anterior. 

No pensamos retroceder (…) de hecho, estamos planeando invertir más en 2020 que en 2019,

dijo el director de logística de Shell para México, Murray Fonseca. 

Uno de los objetivos de la petrolera es operar 1,500 estaciones de servicio en los próximos cinco años y tener su primera estación de carga de vehículos eléctricos este año.