Japón es un país conocido por las largas jornadas laborales, pero Microsoft decidió hacer un experimento: durante los viernes de agosto, los empleados tuvieron el día libre, con goce de sueldo.
¿El resultado? Un alza de 40% en la productividad, respecto al mismo mes de 2018. Además, Microsoft recortó costos, pues se consumió 23% menos electricidad y se imprimieron 59% menos hojas, según un reporte publicado en el sitio web de la empresa.
Otras de las medidas implementadas durante el “Reto Elección Vida-Trabajo Verano 2019” fueron recortar la duración de las juntas de trabajo a máximo 30 minutos e impulsar las comunicaciones vía chat en vez de cara a cara.
Japón ha batallado con reducir la duración de las jornadas laborales mientras enfrenta una escasez de mano de obra y una población que envejece rápidamente, explica Bloomberg, aunque las propuestas del ministro Shinzo Abe para que los lugares de trabajo tengan horarios flexibles y se reduzca el tiempo extra no han sido ampliamente bienvenidas.
Según datos de la OCDE, México es el país en el que los empleados trabajan más horas cada año: 2,148, seguido de Costa Rica, con 2,121 horas, y Corea, con 1,993 horas. En el otro extremo están Alemania, con 1,363 horas anuales, y Dinamarca, con 1,392.
Japón está a la mitad de la tabla, con 1,680 horas al año, y el promedio de los países miembros de la OCDE es de 1,734 horas.
Tras el experimento en Microsoft Japón, 92% de los empleados encuestados dijeron que estaban satisfechos con los cambios y los resultados.
La empresa anunció que llevará a cabo otro reto durante el invierno: los trabajadores no recibirán días libres específicos, pero podrán tomar tiempo libre cuando lo decidan.