Industrias Peñoles es una de las empresas mineras más valiosas de México. Se trata de un conglomerado que realiza actividades enfocadas en todo el ciclo de producción de los metales: desde su extracción hasta la transformación y elaboración de otros productos químicos.

Esta minera ha operado desde hace más de 130 años. Con el paso del tiempo, ha habido cambios y transformaciones en quiénes son los dueños de Peñoles. Sin embargo, desde hace algunas décadas es propiedad de una de las familias más ricas del país. 

De acuerdo con Silver Institute’s, Peñoles es el mayor productor de plata refinada a nivel mundial. Debido a esta actividad, sus propietarios han sido históricamente conocidos como ‘los Reyes de la Plata’.

Quién es el dueño de Peñoles
Fotoarte: EL CEO

¿Quiénes son los dueños de Peñoles?

Según Bloomberg, los dueños de Peñoles son la familia Baillères, representada por Alejandro Baillères, quien heredó el liderazgo empresarial de su padre. El medio explica que este apellido cuenta con el 44% de las acciones de esta compañía, que también cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Peñoles es, además, la ‘posesión’ más valiosa de los Baillères. El medio indica que el patrimonio total de la familia asciende a los 6,580 millones de dólares a la segunda semana de enero. Del total, el 35.56% corresponde a su tenencia accionaria dentro de la compañía minera, la cual está valorada en 2,340 mdd. El resto, se divide entre otras participaciones dentro de Profuturo, Palacio de Hierro y la aseguradora GNP.

¿Desde cuándo la minera es propiedad de los Baillères?

La historia de Peñoles data de 1887, cuando se constituyó como una compañía minera en el estado de Durango. Pero, ¿cómo llegó a ser propiedad de la familia Baillères? La respuesta está a principios del siglo pasado, cuando Raúl Baillères Chávez, el patriarca de esta ‘dinastía’, entró al mundo de los negocios mineros.

La experiencia de Raúl Baillères en el sector minero le permitió incorporarse a Peñoles en 1961, cuando se dio la nacionalización de esta industria. En este contexto, se pedía la incorporación de capital mexicano a todas las compañías y el empresario decidió invertir en ella.

Para 1968, Peñoles experimentó un relevo generacional. Alberto Baillères, padre de Alejandro, tomó las riendas de la compañía. También se incorporó a la BMV y afilió a Química del Rey y Fresnillo como sus subsidiarias.

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