El conglomerado PG&E Corp, propietario de la mayor empresa eléctrica de Estados Unidos por número de clientes, se está preparando para declarar su bancarrota porque enfrenta responsabilidades penales por los megaincendios forestales ocurridos en California que podría no ser capaz de asumir.
Las acciones de la compañía se desploman 48.98% a la 1:39 de la tarde de este lunes (hora de la Ciudad de México), a 8.975 dólares.
PG&E dijo que planea solicitar la protección por bancarrota alrededor del 29 de enero y que está dando a los empleados un aviso de 15 días para cumplir con la ley de California.
La empresa anunció el domingo la salida de su CEO, Geisha Williams, tras menos de dos años en el cargo. Será reemplazada de manera interina por John Simon.
PG&E entrega servicios a 5.4 millones de clientes de electricidad y a 4.3 millones de gas natural en el norte y centro de California y aseguró que no ve ningún impacto en los servicios para sus clientes como resultado de la quiebra.
Al declararse en bancarrota, la compañía podrá trabajar con “víctimas de incendios forestales, clientes, empleados, acreedores, accionistas, la comunidad financiera y socios comerciales”, en un proceso supervisado por un tribunal, señaló la empresa.
Responsabilidad de PG&E en incendios
PG&E enfrenta investigaciones gubernamentales y responsabilidades penales que potencialmente podrían alcanzar los 30,000 millones de dólares, según la compañía, una cifra que representa los daños causados por los incendios ocurridos en los dos años previos.
Según las leyes de California, las empresas de servicios básicos son responsables de cualquier incendio originado por sus equipos, incluso si no hubo negligencia de su parte.
Al menos 18 incendios forestales ocurridos en 2017 tuvieron como origen el equipo de PG&E, han revelado los investigadores gubernamentales, lo que dio pie a cuestionamientos sobre la seguridad del sistema de distribución de electricidad de la empresa.
PG&E se está recuperando de un megaincendio forestal ocurrido en noviembre de 2018 que se extendió por las montañas de California y que causó la muerte de al menos 86 personas, el siniestro más letal y destructivo de la historia de ese estado.
En los documentos presentados a la Corte, la empresa dijo que enfrenta alrededor de 50 demandas de 2,000 personas por estos incendios y más de 700 demandas de 3,600 personas por los ocurridos en 2017.
En 2010, la empresa enfrentó acusaciones sobre la seguridad de sus ductos de gas, luego que una explosión en San Bernardino, California, mató a ocho personas.
Con información de AFP