A la Asociación de Bancos de México (ABM) le gustaría ver a más fintech obteniendo licencias para competir en el terreno de la banca comercial, con su oferta de productos y regulación.
En 2021, la fintech Ualá acordó la compra del banco ABC Capital, en una operación que aún está pendiente de aprobación por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Otras empresas han optado por la adquisición de Sociedades Financieras Populares (Sofipos) para poder ofrecer productos de captación y ampliar su oferta de productos, como Nu con Akala y más recientemente Klar con Servicios Financieros Alternativos.
Nos encantaría que se se animaran a tener una licencia bancaria y que pudieran tener todos los productos y servicios que que ofrece un banco, con la regulación y con la seguridad que le damos a los a los clientes en la banca
comentó Julio Carranza, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), en entrevista.
El nuevo líder de los banqueros mencionó que una de las razones de la fortaleza de la banca ante los episodios de volatilidad en el sistema financiero global radica en la supervisión y regulación con que cuenta, “no hay nada mejor que todo sea muy claro de hacia dónde vamos y que estemos en el mismo canal”.
Carranza menciona que la compra de un banco o la obtención de una licencia por parte de una fintech es uno de los distintos proyectos que hay sobre la mesa cuando se trata de nuevos proyectos digitales en el sistema.
Otros modelos, apuntó, son la transformación digital de un banco tradicional o las instituciones que prefieren un banco digital por separado, como Banorte con Bineo o Santander con Openbank. Hey Banco, de Banregio, también está en espera de la suya.
La integración de estos nuevos bancos digitales surgidos desde instituciones tradicionales también está siendo analizada por la ABM a nivel de estructura, lo que eventualmente podría implicar cambios.
“Uno de los temas que tenemos que que revisar internamente es cómo debe ser el gobierno corporativo en relación a los diferentes grupos de bancos que tenemos, si los vamos a ubicar con el banco grande al que pertenecen o con los de menor tamaño, tenemos que pensarlo”, explicó.
Actualmente la ABM está conformada por cuatro grupos, el Grupo A está conformado por las instituciones de tamaño mediano, el Grupo B por bancos de mayor tamaño, el Grupo C por los dos considerados como los más grandes (BBVA y Citibanamex) y el Grupo D por bancos extranjeros y en su mayoría, de inversión.
Apoyo a pymes puede crecer
El 13 de marzo la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) emitió una regulación que simplifica los requisitos que los bancos deben de incluir en los expedientes de un crédito, de una micro o pequeña empresa, según informó su titular, Jesús de la Fuente, durante la Convención Bancaria.
Lo anterior sienta las bases para poner en marcha el programa de 10,000 millones de pesos en créditos a pymes que se anunció en 2022 y ahora está pendiente que la autoridad emita las reglas para las instituciones bancarias, detalló Carranza.
“Puede ser la base de un paquete mucho más grande de apoyo precisamente a las pymes, si tuviéramos el apoyo por ejemplo, de la banca de desarrollo en algún programa que lográramos este hacer en conjunto o si pudiéramos considerar en la parte fiscal las pérdidas originada por créditos que empresas no pudieran pagar le le daría esta seguridad a la banca para poder este participar de una manera más activa”, expresó.
Banca, con 1.4 billones para prestar
En su discurso al asumir el mando de la ABM, Carranza mencionó que la banca tiene 1.4 billones de pesos disponibles para prestar y las pymes serán un sector importante a financiar.
“La banca tiene este 1.4 billones de pesos disponibles para prestarlo en todo lo que en todo lo que se pueda y toda esta oportunidad que tenemos con el nearshoring, nos va a hacer que la banca también tenga este esa posibilidad de incrementar el crédito también en esos proyectos que vienen de inversión extranjera directa”, expuso.
Agregó que la banca trabajará en búsqueda de programas y proyectos en los que puede involucrarse para colocar crédito.