Exxon Mobil está ahora lejos de ser la compañía más valiosa de Estados Unidos, título que poseía hasta hace algunos años, en medio de la crisis que atraviesa la industria petrolera que se profundizó con la irrupción de la pandemia de COVID-19.

Al igual que otras empresas, Exxon se ha visto afectada por la caída de los precios del crudo, que en abril tocaron territorio negativo por primera vez, debido a una menor demanda a nivel global provocada por el aislamiento durante la crisis sanitaria.

Esto llevó a las mayores compañías petroleras del mundo a reducir sus producción y los costos operativos para aminorar el impacto de la pandemia, lo que se vio reflejado en sus resultados corporativos.

En el segundo trimestre del año, Exxon perdió 1,100 millones de dólares y registró dos trimestres negativos por primera vez en 36 años. En los primeros seis meses de 2020, la pérdida total asciende a 1,700 millones de dólares.

Ahora la compañía se plantea reducir su fuerza laboral a escala mundial, según una portavoz consultada por Reuters este miércoles. Las declaraciones se producen después de que Exxon confirmó un programa de despidos voluntarios en Australia.

Este programa garantizará que la empresa se gestione a través de estas condiciones de mercado sin precedentes

dijo Exxon en un comunicado

La petrolera redujo el gasto de capital de este año en 30%, a 23,000 millones de dólares y planea acelerar los recortes de gastos y operación para mantener su dividendo.

Entre sus planes a corto plazo, Exxon busca vender su participación de 50% en la empresa conjunta australiana Bass Strait. Analistas especulan que la compañía también podría cerrar o vender la planta Altona ubicada en Melbourne, la refinería más antigua de Australia.

La dolorosa despedida del Dow Jones

La crisis que atraviesa Exxon ha pasado factura a su desempeño en bolsa: en lo que va de 2020, las acciones de la petrolera pierden 44%, con un valor de mercado de 166,719 millones de dólares, de acuerdo con Bloomberg.

Esta semana, Exxon dejó de formar parte del Promedio Industrial Dow Jones, donde cotizó desde 1928, en el que fue el mayor ajuste del índice accionario desde 2013, provocado por la división de acciones de Apple, que ya es la empresa más valiosa del mundo.

El cambio de interés de los inversionistas hacia acciones tecnológicas y la irrupción de las energías alternativas han puesto presión sobre Exxon en los últimos años.

Exxon fue la compañía más valiosa por capitalización en años recientes. Desde 2014, cuando sus acciones tocaron un máximo histórico de 104.38 dólares, los títulos de la empresa se desploman 65%.

Con información de Reuters