La Comisión Reguladora de Energía (CRE) ha clausurado en los últimos días instalaciones de abastecimiento de gasolina y diésel, como la planta de IEnova-Valero en Puebla y en las terminales ferroviarias de Hermosillo, Sonora.
El cierre de terminales de ferrocarriles, conocidos como espuelas, que son aquellas donde llega el combustible para distribuirse, es resultado de que las empresas siguen operando aun cuando la CRE no renovó sus permisos.
También es atribuible a que hay empresas que han sido omisas al permitir la entrada de combustibles ilegales, es decir, de productos que entran sin haber pagado impuestos, o que pagaron menos de lo que debían al hacerse pasar por otro tipo de hidrocarburo.
En el primer caso, las empresas afectadas culpan a la CRE, porque ha frenado las renovaciones y otorgamientos de permisos que se requieren en la cadena de producción y comercialización de petrolíferos.
Hay empresas que no tienen trámites liberados por parte de la CRE y eso ya tiene repercusiones en la parte operativa y económica. El trato con la CRE está siendo muy complicado porque no está liberando procesos para la obtención de permisos de distintas índoles
platicó un trabajador de Repsol que pidió no ser citado.
Incluso, los transportistas que tienen el servicio de movimiento de hidrocarburos a través de tanques están totalmente paradas porque la CRE no libera esos permisos. Además, hay nerviosismo en el sector porque es el propio regulador el que ha detenido el otorgamiento de permisos, lo que impide que las empresas cumplan con la normatividad, agregó.
La CRE suspendió las instalaciones operadas por Windstar y Bulkmatic en Hermosillo, la terminal que tiene IEnova con Valero en Puebla. El cierre de IEnova-Valero se debió a que el producto permaneció varios días en el autotanque del ferrocarril y la CRE determinó que este hecho es almacenamiento, una actividad que no le había autorizado a la firma.
“La CRE determinó que al no contar con ese tipo de autorizaciones, se estaba incumpliendo o haciendo algo indebido y clausuró las instalaciones”, dijo una fuente cercana al proceso.
IEnova fue consultada, pero al cierre de esta edición no emitió su versión oficial.
¿Cómo clausuran las instalaciones?
Luego de que el producto se procesa en las refinerías, se traslada a las terminales de abastecimiento, donde los grandes comercializadores se suministran al mayoreo para vender al menudeo.
Ven posible desabasto en petrolíferos ante frenos del gobierno
Según testimonios de trabajadores de instalaciones clausuradas en Hermosillo, los auditores de la CRE arriban a estos espacios sin previo aviso y solicitan la entrega de diversos permisos. De no contar con ellos, la CRE ordena el cierre inmediato y avisa que realizará una nueva auditoría.
Cierra, pero informa de una nueva auditoría para llegar a una conclusión del motivo que originó el cierre, eso frena los procesos propios de la empresa y de sus clientes. La empresa está buscando un proceso en la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) para que pueda presentar pruebas y demostrar que actúa conforme a la Ley
dijo un analista sobre el caso de IEnova-Valero.
Erradicar el ‘huachicol’; la otra cara de la moneda
César Cadena, presidente del clúster de Nuevo León y Nicolás Domínguez, académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), comentaron que las autoridades están cerrando las instalaciones de empresas que incumplen con la ley y que han sido omisas ante el huachicol, pues son 10 y 15 millones de litros diarios de combustible ilegal los que entran al mercado.
Hay que poner dimensión, 10 millones de litros sobre 7 pesos, son 70 millones de pesos diarios. Estamos hablando de 2,000 millones de pesos al mes, de 30,000 millones de pesos al año, no es cosa menor
expresó César Cadena.
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha reclamado que pierde mucho en el cobro de impuestos por la entrada al mercado de gasolina o diésel ilegal.
Cadena informó que en Monterrey había cinco puntos ferroviarios donde se vendía ‘huachicol fiscal”, (combustible por el que no se declara impuestos).
La autoridad está revisando este contrabando de ferrocarril, entra a las terminales y se encuentra con muchas donde realmente se ejercitaba el contrabando, y las cierra
, declaró.
En Monterrey vemos por primera vez en muchos meses que no hay oferta de ‘huachicol’ fiscal. “Es una señal de que se está trabajando y de que antes hubo un relajamiento”, consideró.
Por separado, Nicolás Domínguez, aseguró que las suspensiones a compañías privadas importadoras de petrolíferos son consistentes con las políticas del gobierno actual de recuperar negocios de hidrocarburos como son los petrolíferos para Pemex.
Expuso que el caso de las suspensiones recientes, el gobierno arguye a que las empresas no cumplen con los reglamentos, y aunque no profundiza en detalle, responden a que participan en el contrabando de hidrocarburos o internan los productos importados por lugares no autorizados.
“Con esta medida, el gobierno lograría que Pemex importe más petrolíferos, y por lo tanto, que gane más terreno en el mercado y que el SAT obtenga más porque las compañías privadas pagarían lo que deben por los petrolíferos que se internen en el país”, indicó.
Se afectará la competencia y subirán los precios
Para Óscar Ocampo, coordinador de energía del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), las empresas se encuentran ante un estado de vulnerabilidad frente al acto de autoridad porque no hay instancias a las que recurrir.
La CRE tiene una completa cerrazón y las empresas no tienen cómo demostrar que sí tienen todo en regla
comentó.
Sostuvo que los cierres afectarán la competencia porque generarán un mercado concentrado, lo que elevará los costos a los consumidores.
“Todas las acciones (del gobierno) van encaminadas sin lugar a dudas a reconcentrar ese mercado de los combustibles en general- gasolina, diésel, y gas licuado de petróleo (LP)”, reiteró.
Si reconcentran todo en un jugador no van a bajar precios ni se va lograr eficiencia. La respuesta es competencia, pero las acciones del gobierno van encaminadas para lo contrario y esto tiene implicaciones en costos ¿Quién los va absorber? Los consumidores o la hacienda pública a través de mayores subsidios, que al final del día es un costo que paga el contribuyente, concluyó.