La empresa Johnson & Johnson anunció que a partir de 2023 dejará de vender talco para bebés a nivel mundial.
Desde 2020 la firma puso fin a la comercialización de este producto en Estados Unidos y Canadá debido a diversas demandas por parte de los consumidores.
Como parte de una evaluación de cartera mundial, hemos tomado la decisión comercial de hacer la transición a una cartera de talco para bebés a base de almidón de maíz
informó la compañía.
El talco para bebés trajo para la multinacional 38,000 demandas por parte de usuarios quienes aseguraban que el producto contaba con asbesto, situación que la firma calificó de “información errónea”.
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Johnson & Johnson huye de las demandas
Como parte de su estrategia para poner fin a las demandas, la empresa asignó los reclamos a la subsidiaría LTL Management para inmediatamente declararla en quiebra.
Aunque los quejosos solicitan una solución y una defensa real por parte de la fabricante, ésta argumenta que declarar a la subsidiaria en bancarrota es una forma equitativa de compensar la situación.
Ben Whiting, representante legal de los demandantes y miembro de la firma Keller Postman, dijo que la declaración en quiebra provocó que las denuncias se detuvieran, por lo que la decisión de cancelar la venta del producto no las afectará inmediatamente.
Pero si un tribunal federal de apelaciones permite que los casos avancen, los consumidores podrían intentar usar la decisión de la firma de retirar los productos como evidencia.
El talco para bebés de la compañía estadounidense entró al mercado en 1894 posicionándose como uno de los productos insignia.
En 2018 una investigación realizada por Reuters demostró que la empresa sabía que su producto contenía productos cancerígenos desde 1971 y hasta principios de este siglo.
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Con información de Reuters
