La empresa de edulcorantes y almidones Ingredion ve un potencial para incrementar sus ingresos con la propuesta del reetiquetado en alimentos y bebidas que impulsa el gobierno mexicano.
La iniciativa pretende mostrar en su etiqueta frontal los ingredientes y la cantidad de azúcar, grasa y sodio que contienen. De esta forma, las empresas tendrán que redoblar los esfuerzos para tener componentes más amigables y atractivos para que los consumidores los adquieran.
“Nos brinda una oportunidad de seguir cocreando con nuestros clientes para dar soluciones en ingredientes que ayuden a que los productos que ofrecen al consumidor final sean los que requieran, apegados a las normas establecidas”, dijo Luz del Carmen Nájera, directora de asuntos corporativos y sustentabilidad de Ingredion en México.
La firma de origen estadounidense convierte frutas y vegetales en ingredientes con un valor agregado para la industria de alimentos, bebidas, papel y corrugado, cervecería y de higiene personal.
Tiene diferentes clientes, pero el 70% de sus ventas se concentra en la industria de alimentos y bebidas.
En julio pasado, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, presidida por Miroslava Sánchez, de Morena, aprobó la iniciativa para reformar y adicionar diversos artículos a la Ley General de Salud en materia de sobrepeso, obesidad y etiquetado frontal de advertencia de alimentos y bebidas no alcohólicas.
Las apuestas para el futuro de los alimentos
Las nuevas tendencias en el consumo a nivel mundial se ven reflejadas en las demandas que los consumidores hacen a las grandes empresas de alimentos y bebidas.
Por esto, Ingredion se mantiene vigente con la implementación de un programa que responda a las nuevas necesidades:
Reducción de azúcar.- En línea con la tendencia de los consumidores de comprar productos más saludables, la reducción en la cantidad de azúcar en uno de los puntos en los que que más atención le prestan las compañías.
Soluciones de textura.- Resolver retos en los productos a los que se les añade fibra o proteína sin que cambie la textura del alimento.
Proteínas alternativas.- Desarrollar nuevos tipos de proteínas de origen vegetal. La mayoría de esta se extrae de la soya.
Etiquetado limpio.- Que el etiquetado en los productos sea percibido por los clientes como simple y que los ingredientes cumplan diversas funciones para no tener que agregar tantos.
