El Pleno del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) dio ‘luz verde’ a la propuesta de Telmex-Telnor para la transferencia del personal a las empresas mayoristas en cumplimiento con la separación funcional.

La autoridad reguladora detalló en un comunicado que para la implementación de la transferencia, que está prevista a realizarse a más tardar el 31 de enero próximo, se prevén dos esquemas.

Por un lado, los trabajadores sindicalizados que en su momento realicen funciones asociadas a los servicios que prestarán las empresas mayoristas derivadas de separación funcional podrán emplear el esquema de prestación de servicios.

Por otro, los trabajadores no sindicalizados o de confianza que lleven a cabo funciones asociadas en el mismo sentido, podrán emplear el esquema de sustitución patronal.

¿Qué es la separación funcional?

La separación funcional de Telmex-Telnor es resultado de la revisión bienal de 2017 sobre las medidas impuestas por el IFT al Agente Económico Preponderante en Telecomunicaciones (AEP).

En ese mandato, la autoridad determinó la pertinencia de separar de ambas empresas la provisión de los servicios mayoristas, que son aquellos relacionados con la red local, infraestructura pasiva y enlaces dedicados asociados a dicha red.

La provisión de este tipo de servicios es esencial para que los operadores puedan ofrecer más servicios, en mejores condiciones de calidad y precio al usuario final, señaló el Instituto en el documento.

Los esquemas

Bajo el esquema de prestación de servicios, Telmex y Telnor podrán proveer a las empresas mayoristas del personal independiente estrictamente necesario, a efecto de que estas estén en posibilidad de operar también de forma independiente y, también, de proveer los servicios mayoristas regulados que les fueron asignados, en términos y condiciones no discriminatorias.

Este esquema no impone a las empresas mayoristas cargas económicas o pasivos laborales adicionales a las que tendrían que hacer frente bajo el esquema originalmente propuesto por el preponderante,  es decir, de sustitución patronal para el personal sindicalizado.

Así, esta figura por sí misma no compromete la viabilidad de las empresas mayoristas, ni la independencia del personal, y favorece la operación independiente, lo cual se alinea con el espíritu de la medida impuesta por el Instituto.

El IFT detalló que tanto Telmex como Telnor también propusieron una serie de adecuaciones orientadas a fortalecer la independencia del personal y la operación de las empresas mayoristas.

Estas están relacionadas con el establecimiento de criterios más estrictos para los miembros del Consejo de Administración y del Director General; la modificación al alcance del Comité de Auditoría y la presentación de una nueva propuesta de códigos de actuación y conducta que se encuentre alineada a los cambios propuestos para la transferencia del personal.

Además, están relacionadas con la ruta para implementar esta transferencia de personal mediante la adecuación de los estatutos sociales de las empresas mayoristas.

“Con este esquema, Telmex-Telnor podrán transferir a las empresas mayorista el personal necesario para que cumplan con su objeto social, dando cumplimiento a lo ordenado por el IFT, y respetando en todo momento los derechos laborales de los trabajadores”, señala el documento.

Las obligaciones

Entre las obligaciones del Plan Final de Separación Funcional se encuentran, entre otras, la obligación de presentar al Instituto un plan de transferencia de recursos (activos y pasivos), uno de migración de personal y otro de elementos de red e infraestructura.

Asimismo, Telmex – Telnor debe someter a aprobación del Instituto los estatutos sociales que regirán el funcionamiento de las nuevas empresas, los códigos de ética y los de actuación de su personal.