Grupo Famsa logró salir de concurso mercantil al que se acogió en 2020, pero con un tamaño más compacto y un panorama de desaceleración en el consumo que le pone desafíos por delante.
El pasado 8 de febrero, la empresa notificó que emergió del proceso con 10,000 millones de pesos en pasivos reestructurados, la desaparición de cinco centros de distribución y 148 tiendas, así como 11,647 colaboradores menos.
Previamente, el grupo también se quedó sin Banco Famsa, cuyo proceso de liquidación fue notificado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores en junio de 2020, derivado de problemas créditos otorgados a personas relacionadas del grupo y falseo de su índice de capitalización.
De esta forma, la empresa que desde antes de la pandemia comenzaba a recargarse más en su negocio de préstamos, tendrá que volver a sus orígenes de venta de productos a plazos para enfrentar a competidores como Elektra y Coppel, ambos con su banco.
Lo están haciendo como se hacía tradicionalmente, a través del brazo comercial, sin embargo está complicado porque no tiene la base de capital necesaria para hacer una operación agresiva en ese sentido, y la verdad tienes que hacerlo porque tu competencia lo hace, tus clientes te demandan ese tipo de oferta
comentó Carlos Hermosillo, analista bursátil independiente.
La reducción de sucursales también convierte a Grupo Famsa en una especie de jugador de nicho contra los grandes participantes. Al cierre del tercer trimestre, por ejemplo, Famsa contaba con apenas 231 tiendas en territorio nacional, contra las 1,145 tiendas que contabilizaba Elektra.
Para salir adelante, la empresa tendrá que dar batalla a partir de la oferta del producto y financiera, añadió el especialista.
“Es una combinación de varios factores, precios, disponibilidad física y planes financieros que les puedas ofrecer, plazos términos y ese tipo de cuestiones serán importantes, al menos igualar lo que ofrece su competencia local”, añadió Hermosillo.
Nuevo capital
En el comunicado del 8 de febrero, la empresa también anunció la entrada de capital fresco por 1,200 millones de pesos para impulsar la operación del negocio y “asegurar la generación de flujos futuros que sustenten la continuidad del negocio, el cumplimiento de nuestros compromisos concursales y el reposicionamiento dentro de la industria de venta minorista”.
Aunque aún está por saberse si estos recursos nuevos vendrán de la emisión de acciones nuevas, capitalización de pasivos u otro método, Hermosillo menciona que, “dependiendo de esto, va a estar la capacidad que tenga de con esos recursos apoyar la operación de la empresa”.
En lo que va del año, la acción de Famsa tiene un rendimiento de 105.7%, ante las noticias de su salida de concurso mercantil, pero su comportamiento futuro dependerá de los detalles del aumento de capital.
Sin los detalles, como accionista no sé donde estoy parado, qué vale mi capital anterior o qué compromiso adquiero
dijo Hermosillo
En su reporte de resultados al tercer trimestre, la empresa apuntó a la falta de liquidez como un obstáculo para la recuperación de sus ventas, al impedir un abasto suficiente de bienes durables en sus tiendas y de recursos para publicidad.
Esta limitación tampoco ha permitido que reporte un flujo operativo positivo desde el segundo trimestre de 2020, lo que restringe su desarrollo.
Los niveles de venta no han llegado a ser suficientes para la generación de un UAFIRDA positivo, principalmente por la limitada capacidad de abasto de producto en nuestras tiendas físicas y el restringido destino de recursos a la publicidad que limitaron el impulso de las ventas y la recuperación de los niveles de operación anteriormente obtenidos
dijo Luis Gerardo Villarreal, director general de la compañía, en el reporte financiero de la empresa