El boom de la Inteligencia Artificial (IA) es unos de los boom en el mundo tecnológico y de negocios; sin embargo, Goldman Sachs consideró que su implementación es excepcionalmente cara y para justificarlo debe ser capaz de resolver problemas complejos, lo cual no es capaz de hacer en la actualidad.

De acuerdo con la institución financiera se calcula que la “promesa” de la IA generativa llevará a las empresas a invertir alrededor de 1,000 millones de dólares en los próximos años para su desarrollo, que implica desde centros de datos, chips, otra infraestructura y la red eléctrica.

El jefe de investigación de acciones globales de Goldman Sachs, Jim Covello, indicó que el costo de desarrollar y ejecutar tecnología de Inteligencia Artificial significa que las aplicaciones deben resolver problemas extremadamente complejos e importantes para que las empresas obtengan un retorno de la inversión

“Si bien la cuestión de si la tecnología de IA alguna vez cumplirá la promesa que hoy en día entusiasma a muchas personas, es ciertamente discutible (…) es excepcionalmente costosa y, para justificar esos costos, la tecnología debe ser capaz de resolver problemas complejos, para lo cual no está diseñada”, afirmó.

Inteligencia artificial
Foto: EL CEO

Rentabilidad de la IA en duda

Jim Covello dice que la pregunta crucial es ¿qué problema de 1,000 millones de dólares resolverá la Inteligencia Artificial? Además, que los inventos que realmente cambian vidas, como el internet, permitieron que las soluciones de bajo costo sustituyeran a las de alto, incluso en sus inicios, a diferencia de la IA actual.

También duda que la Inteligencia Artificial aumente la valoración de las empresas que utilizan la tecnología, ya que cualquier ganancia de eficiencia probablemente sería eliminada por la competencia y el camino para aumentar realmente los ingresos no está claro.

Mi principal preocupación es que el costo sustancial de desarrollar y ejecutar tecnología de IA significa que las aplicaciones de IA deben resolver problemas extremadamente complejos e importantes para que las empresas obtengan un retorno de la inversión (ROI) adecuado.

Expuso que actualmente se ha mostrado más prometedora para hacer que los procesos existentes (como la codificación) sean más eficientes, aunque las estimaciones de estas mejoras de eficiencia han disminuido y el costo de utilizar la tecnología para resolver tareas es mucho más alto que los métodos existentes.

“Los defensores de la IA parecen simplemente confiar en que los casos de uso proliferarán a medida que la tecnología evolucione. Pero dieciocho meses después de la introducción de la IA generativa en el mundo, no se ha encontrado ni una sola aplicación verdaderamente transformadora (y mucho menos rentable)”.

¿La inteligencia artificial es una burbuja?

El jefe de investigación de acciones globales de Goldman Sachs afirmó que no es la primera vez que un “ciclo de exageración” ha terminado en un gasto que al final no da resultado; pero las grandes empresas no tienen más remedio que participar en la carrera y la inversión masiva continuará.

En este sentido, el analista del banco estadounidense recordó otros casos, como la realidad virtual, el metaverso y blockchain, tecnologías que experimentaron un gasto sustancial, pero que hoy en día tienen pocas aplicaciones en el mundo real.

Covello expuso que algunos inversionistas han aceptado que estas estrategias pueden tardar un tiempo en dar resultados, pero otros no creen en ese argumento. Por ejemplo, Salesforce, donde el gasto en IA es sustancial y sufrió la mayor caída diaria de sus acciones desde mediados de la década de 2000, tras resultados del segundo trimestre un ligero aumento en los ingresos a pesar de este gasto.

Sin embargo, reconoció que el estallido de la burbuja de la Inteligencia Artificial actual puede no resultar tan problemático como el estallido de la burbuja de las “puntocom”, simplemente porque muchas empresas que gastan dinero hoy están mejor capitalizadas que las empresas que gastaban dinero en aquel entonces.

“Una de las lecciones más importantes que he aprendido en las últimas tres décadas es que las burbujas pueden tardar mucho en estallar. Por eso recomiendo seguir invirtiendo en proveedores de infraestructura de IA”.

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