El gobierno de México aún tiene un último recurso legal para impugnar el fallo de la jueza séptima que analiza la suspensión definitiva de la implementación de la norma del etiquetado en alimentos y bebidas no alcohólicas (NOM-051): el recurso de revisión.

El próximo miércoles se llevará a cabo una audiencia, donde se determinará si se otorga la suspensión definitiva a la norma, dijeron integrantes de la asociación civil Alianza por la Salud Alimentaria.

De todas formas, aunque se otorgue la suspensión definitiva, el gobierno aún puede interponer un recurso, conocido como de revisión

dijo Quetzali Ramos, abogada experta en salud, en conferencia de prensa.

Javier Zúñiga, coordinador legal en El Poder del Consumidor, comentó que la jueza cuenta con argumentos legales para rechazar la suspensión, al considerar que es una norma de interés público al ser una medida para mitigar los altos niveles de diabetes, obesidad y sobrepeso que se viven en México.

“Esta suspensión no solo está retrasando el inicio de la aplicación de la norma, sino también está evitando que la ciudadanía conozca la información de las reuniones de los grupos de trabajo”, comentó Ana Larrañaga, coordinadora de la colación Contrapeso.

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) dio a conocer el domingo 1 de marzo que lograron un amparo que detuvo el proceso de la NOM-051.

El Juzgado Séptimo de Distrito en Materia Administrativa otorgó el pasado 26 de febrero a la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin) y al CCE la suspensión provisional del proceso de creación de la norma del nuevo etiquetado, al argumentar que no se les tomó en cuenta al momento de su creación.

Sin embargo, la asociación civil sostiene que tiene pruebas que la iniciativa privada estuvo presente en todo el desarrollo del nuevo etiquetado.

IP estuvo de acuerdo, afirma El Poder del Consumidor

Según los integrantes de Alianza por la Salud Alimentaria, en el proceso de creación para la NOM-051, la iniciativa privada estuvo de acuerdo en todos los puntos, incluidos el cambio de etiquetado a uno de advertencia, el mostrar la leyenda que el producto contiene edulcorantes o cafeína y la regulación de los elementos de publicidad dentro de los empaques.

“Tuvimos un consenso en el 98% de los puntos revisados, lo que quiere decir que hubo un diálogo, una escucha. El único punto que no se logró un conceso fueron los criterios que se establecieron para fijar qué productos tenían que tener el nuevo etiquetado”, dijo Paulina Magaña, coordinadora de salud alimentaria en El Poder del Consumidor.

Agregó que los criterios relacionados se tomaron de los lineamientos fijados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

Gobierno defiende NOM-051

El secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, defendió la norma del etiquetado en alimentos y bebidas no alcohólicas (NOM-051) que el gobierno tiene planeado implementar con el propósito de proteger la alimentación y la salud de la población mexicana, una de las más obesas en el planeta.

Durante la conferencia matutina de este lunes, el funcionario explicó que el amparo promovido por la iniciativa privada fue porque esta tiene dudas sobre la implementación de la medida.

“No vamos a abandonar la lucha contra la epidemia de la obesidad. Refiriéndonos a la norma del etiquetado y en su forma de instalación, no ha terminado y bienvenido, en el sentido jurídico, se está revisando”, dijo.

Añadió que la norma fue respaldada por organismos internacionales de salud como la Organización Mundial de la Salud y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés), que califica la medida como “de las mejores del mundo”.

En tanto, la Secretaría de Economía, la de Salud y la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) sostuvieron a través de un comunicado que el nuevo etiquetado cumple con la reforma a la Ley General de Salud publicada en el Diario Oficial de la Federación por el Ejecutivo Federa el 8 de noviembre de 2019.

“El nuevo etiquetado frontal de alimentos y bebidas no alcohólicas advertirá de manera veraz, clara, rápida y simple sobre el exceso de azúcar, grasas y sodio, así como de contenido energético en un producto”.

Además, aseguraron que, aunque la suspensión de la norma es provisional, ya fue impugnada para su revisión ante las autoridades jurisdiccionales superiores.