Ford Motor advirtió a los inversionistas que la compañía espera incurrir en un extra de 1,000 millones de dólares en costos durante el tercer trimestre debido a la alta inflación y las fallas en la cadena de suministro.

La firma automotriz calcula que a finales de septiembre tendrá entre 40,000 y 45,000 vehículos sin poder vender a la espera de contar con los componentes que permitan terminarlos, lo que reducirá sus ingresos del tercer trimestre.

Entre los miles de vehículos detenidos por las fallas en la cadena de suministro se encuentran principalmente camiones de alto margen y SUV que no han podido llegar a los concesionarios.

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Menos ingresos, menos ganancias

La compañía espera completar y entregar los vehículos a los concesionarios en el cuarto trimestre, además de que todavía está proyectando ganancias ajustadas para 2022 antes de intereses e impuestos de entre 11,500 y 12,500 millones de dólares.

Las acciones de la compañía cayeron alrededor del 5 % en el comercio extendido después de la actualización.

El fabricante de automóviles prevé que las ganancias ajustadas del tercer trimestre antes de los intereses e impuestos se deban entre 1,400 millones de dólares y 1,700 millones de dólares.

Ford agregó que los ejecutivos “proporcionarán más dimensión sobre las expectativas de rendimiento para todo el año” cuando informe sus resultados del tercer trimestre el próximo 26 de octubre. 

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Suministro desafía a automotriz

Los fabricantes de automóviles han estado luchando contra los problemas de la cadena de suministro desde que la pandemia de coronavirus detuvo la fabricación a principios de 2020. 

La demanda siguió siendo fuerte a pesar de los problemas continuos con la disponibilidad de piezas, específicamente, chips semiconductores.

El mayor rival de Ford, General Motors, anunció problemas similares a principios de este año. El 1 de julio, GM advirtió a los inversionistas que los problemas de la cadena de suministro afectarían las ganancias del segundo trimestre, al asegurar que alrededor de 95,000 vehículos en su inventario carecían de algunos componentes.

GM, en ese momento, también ajustó su proyección anual a la espera de que “sustancialmente todos estos vehículos” se completen y se vendan a los concesionarios antes de finales de 2022.

Con información de CNBC y EFE