Los recientes aranceles impuestos al acero mexicano no están relacionados a las negociaciones del T-MEC, ni a los aranceles que Donald Trump había impulsado previamente. En esta ocasión, las tarifas son consecuencia de una solicitud del American Institute of Steel Construction (AISC), quienes pidieron al Departamento de Comercio estadounidense iniciar una investigación por subsidios y posible dumping del material mexicano.
Lo que se publicó recientemente fue la resolución preliminar que este departamento emitió respecto a los subsidios que nuestro país otorga como fomento a la industria del acero. En entrevista con El Ceo, Brian Raff, vocero de AISC, evitó señalar las razones específicas que llevaron al instituto a solicitar la investigación, pero aclaró que su agrupación se encuentra a la espera de las resoluciones definitivas para analizar sus acciones futuras, y que está lista para continuar con los procedimientos que sean necesarios.
Posterior a las resoluciones definitivas, los productores mexicanos todavía cuentan con tres instancias de impugnación, aunque sólo podrán utilizar una de ellas: la Corte de Comercio de Estados Unidos, un tribunal arbitral según el capítulo XIX del TLCAN y la solución a controversias de la OMC.
Las primeras dos opciones pueden ser solicitadas por los particulares afectados, pero la Organización Mundial de Comercio sólo actuará si el Gobierno Federal Mexicano así lo solicita. En este caso sería el jurídico de la subsecretaría de Negociaciones Comerciales Internacionales quien evaluaría el caso y determinaría si hay elementos suficientes para llevarlo ante la OMC.
(si se utiliza la OMC) el particular no tiene qué hacer más que convencer a su Gobierno(…) Tenemos mucha fortuna de que en el T-MEC se haya mantenido ese capítulo XIX que nos da la oportunidad como particulares de que, aunque mi gobierno no quiera, yo puedo llevar el asunto a un tribunal internacional.
Óscar Cruz Barney, Integrante del Cuarto de Junto en las negociaciones del T-MEC e investigador en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM
La última vez que Estados Unidos emitió aranceles al acero mexicano (25%), los productores mexicanos pagaron 400 millones de dólares en 11 meses, y las exportaciones bajaron 12% tan solo durante el primer trimestre, de acuerdo con Canacero. Estas nuevas tarifas son mucho más severas, y habrá que esperar para conocer sus efectos en los volúmenes de comercio entre ambos países.
Mediante un comunicado, la Canacero explicó que los “subsidios” señalados por Estados Unidos son en realidad programas de desarrollo industrial, y que por lo tanto no son sancionables al amparo de la OMC. Además aclaró que está a favor de combatir el comercio desleal, pues nuestro país también es víctima de subsidios reales empleados por países con “economías centralmente planificadas(…) como es el caso de China”. La cámara también solicitó a la Secretaría de Economía establecer una estrategia de defensa.
En Estados Unidos, el costo político de los aranceles podría ser alto para Donald Trump. Entre los 12 estados más impactados por las tarifas se encuentran Pennsylvania, Texas y Iowa: tres estados que el presidente ganó en 2016, pero que en las elecciones intermedias le representaron al partido republicano pérdidas por 4, 2 y 2 miembros del congreso, respectivamente.
Estas son las empresas que el gobierno estadounidense impuso derechos compensatorios
De las ocho empresas a quienes se les impusieron derechos compensatorios en la importación de acero estructural por parte del Departamento de Comercio de Estados Unidos, dos son propiedad del empresario Carlos Slim.
Estas compañías tendrán una tasa de subsidio preliminar entre el 0.01% y el 74.01%. En total las ventas del acero estructural hacia el país del norte ascienden a los 622.4 millones de dólares.
La tasa de subsidio preliminar para todos los demás productores y exportadores mexicanos se fijó en 13.62%, según informó la dependencia estadounidense.
Además, no todas las firmas son mexicanas, dos son filiales de compañías norteamericanas.
Sin embargo, el 10 de julio, Grupo Carso emitió un comunicado en el que desmentía que Operadora Cicsa y Swecomex exportaran acero estructural a Estaos Unidos.
Building Systems de México
La empresa con sede en Apodaca, Nuevo León, se dedicada a la manufactura de vigas de acero, sistemas de marcos y varios productos metálicos para la industria de la construcción no residencial, de acuerdo a información de Bloomberg.
Norman C. Chambers funge como CEO y presidente del consejo de la empresa que opera como subsidiaria de NCl Building Systems es uno de los mayores fabricantes y comercializadores de productos metálicos para la industria de la construcción no residencial en América del Norte.
Corey
La empresa fundada en 1979 con sede en Guadalajara, se dedica a la distribución de acero estructural y placa ancha, según información de su página web.
La empresa forma parte de Grupo Recal, comandado por René Calderón Bujdud quien está detrás de proyectos en la Ciudad de México como Torre BBVA Bancomer, Torre Reforma, Torre Virreyes y Torre Manacar. Así como la Refinería Miguel Hidalgo en Tula, Hidalgo y el Puente Baluarte en Sinaloa, Durango.
Acero Tecnología
La firma también conocida como Atecno, provee servicios de construcción tales como la edificación de la estructura de acero para los edificios y otros.
La empresa está fincada en Nuevo León y fue fundada en 1996 por Sergio E. González Luna, de acuerdo a datos de Bloomberg.
Su planta tiene una capacidad de producción de cerca de 2,000 toneladas por mes, según su página de internet.
Algunos proyectos en los que estuvo involucrada es la planta de la Cervecería Modelo en Piedras Negras, Coahuila, un Outlet en San Nicolás de los Garza, Nuevo León, entre otros.
Construcciones Industriales Tapia
La empresa mexicana desarrolla proyectos integrales de ingeniería, procura y construcción para diferentes sectores como la petroquímica, refinación, energía, cementera, alimenticia, infraestructura entre otras.
Entre algunos de sus proyectos, estuvo la estructura para horno en la planta de Etileno XXI, en Coatzacoalcos, Veracruz durante 2013.
La planta fue vendida a Pemex a un sobreprecio por parte de una filial de la brasileña Odebrecht.
Estructuras Metálicas la Popular / MSCI
La compañía se dedica a la fabricación de estructuras metálicas y está afincada en Tijuana, Baja California
Operadora Cicsa
Esta filial de grupo Carso, propiedad de Carlos Slim, provee maquinaria industrial. Se dedica a la elaboración de camiones y tractores con presencia en todo el territorio nacional.
Cicsa es un conglomerado de diversas empresas que se enfocan en los sectores que van desde telecomunicación, sistemas de energía, conducción de agua, gas e hidrocarburos, construcción civil, entre otros.
Swecomex – Guadalajara
Esta empresa forma parte de Carso Infraestructura y Construcción, también propiedad de Carlos Slim.
Swecomex se enfoca en la fabricación de equipo y prestación de servicio para la industria de los energéticos. Enfocada en el diseño, construcción y procura de los proyectos para el sector petrolero, químico y petroquímico.
La firma cuenta con una planta de fabricación en Guadalajara, Jalisco, en donde se fabrica y se diseña parte de sus productos que brinda, revelan los datos de su página de internet.
Preacero Pellizzari México
La compañía cuenta con más de 50 años de experiencia en la fabricación de estructuras metálicas y en desarrollo de ingeniería para diferentes proyectos.
Entre los sectores en los que tiene injerencia está el petroquímico, gas y minería. También el industrial, comercial, residencial e institucional.
