En 2020, el comercio electrónico en México registró un crecimiento de 81% gracias al confinamiento por la pandemia de COVID-19, por lo que generó un valor de 316,000 millones de pesos.
Esta cifra de valor de mercado equivale al 9% del retail en el país, de acuerdo con una estimación de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO).
El Estudio de Venta Online 2021, realizado en colaboración con Netquest y Netrica by GfK, revela la mayor adopción del canal de venta online en el último año como consecuencia del prolongado confinamiento y las medidas de distanciamiento social.
Entre ellos, el 56% declara haber comprado en línea en el último mes, y de este grupo, el 16% compró en el canal digital por primera vez, reflejo de los cambios que los consumidores y los comercios han experimentado.
Asimismo, se percibe una mayor conciencia ambiental ya que el 53% asegura estar dispuesto a reciclar o reutilizar los empaques de productos que compra.
Si bien, en algunos casos, el consumidor ha retomado algunas de sus rutinas, mantiene precauciones ya que, para la mayoría (59%), la principal preocupación es contagiarse.
Además, el estudio observa una mayor diversificación del consumidor online, ya que este año hay una mayor proporción de mujeres (53%) que de hombres (47%), así como mayor presencia de segmentos mayores a 45 años.
Asimismo, resalta que el 98% usa smartphones para comprar en internet o investigar sobre una compra.
El análisis revela que se mantienen los hábitos relacionados con la búsqueda y compra de productos y servicios en internet.
¿Por qué compras?
Entre las principales razones para comprar en línea destaca que el 60% lo hace por encontrar productos no disponibles en tiendas físicas y también por recibir compras a domicilio.
En tanto, un 57% compra en línea para ahorrar tiempo, mientras un 55% por evitar aglomeraciones en tiendas físicas y comparar precios y variedades.
Además, este año creció la frecuencia de compra: el 50% compra productos de manera semanal.
Las categorías de productos preferidas para comprar por canales digitales son comida a domicilio, moda y belleza y cuidado personal, en más de un 50%.
En tanto, en servicios, las categorías más compradas son servicios de suscripción, telefonía móvil y servicios bancarios.
Antes de realizar una compra, el comprador consulta cinco fuentes, en promedio, siendo los buscadores y los sitios web multicategoría las principales.
Además, durante el año también se detectó una caída en el comportamiento omnicanal causado por el cierre de puntos físicos durante el confinamiento.
En cuanto a la percepción de seguridad, seis de cada 10 aseguran sentirse seguros al comprar en línea. En tanto, quienes no compran en el canal digital, destacan que la principal motivación para hacerlo tiene que ver con la seguridad.
En general, los métodos de pago más utilizados son las tarjetas de débito y crédito, aunque los métodos varían según la categoría.
El 30% de los consumidores declara haber realizado alguna devolución, sobre todo porque el producto no le quedó o no funcionó (39%), porque el producto llegó incompleto (30%) o porque venía dañado (25%).
En el otro lado de la moneda, el 70% declara estar satisfecho con sus compras en línea.