El regreso de Bob Iger a la dirección ejecutiva de Disney significa para la compañía una completa reconfiguración en busca de mejorar los resultados, además de abordar temas que Bob Chapek, exCEO, dejó inconclusos.
La llegada de Iger se produce en medio de diversas dificultades como la pérdida de 1,500 millones de dólares en su unidad de transmisión durante el tercer trimestre y la caída de aproximadamente el 50% de sus acciones desde su pico de marzo de 2021.
Los rumores de una posible fusión con Apple luego de haber realizado compras como las de 21st Century Fox y Marvel Entertainment, son otro de los puntos que acechan a la casa del ratón.
Al respecto, Iger ha tomado una postura clara, acallando cualquier supuesto al indicar que es “pura especulación” y no espera que Disney haga grandes compras en el corto plazo.
Uno de los principales objetivos del nuevo CEO es cambiar el enfoque que se le ha dado a las plataformas de streaming como Disney+, ESPN+ y Hulu, al dejar en segundo plano el número de suscriptores para centrarse en la rentabilidad.
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Reestructura con cargos por deterioro
A través de un documento regulatorio, Walt Disney anticipó cambios organizacionales y operativos en la compañía que podrían resultar en cargos por deterioro.
Asimismo, adelantó que durante el nuevo mandato de Iger por los próximos dos años la empresa deberá encaminarse hacia un crecimiento renovado. Mientras establece una dirección estratégica para la compañía, Disney dijo que anticipa cambios en los próximos meses.
Iger anunció planes para reestructurar la División de Medios y Entretenimiento de Disney, una unidad que su predecesor creó en octubre de 2020 para centralizar la distribución de contenido.
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Con información de Forbes y Reuters
