A partir de esta semana, Disney, compañía más grande de entretenimiento, dejará de pagar a más de 100,000 trabajadores en todos sus parques temáticos y hoteles para resistir la crisis originada por la pandemia de coronavirus en todo el mundo.
Esta medida permitirá a la empresa, dirigida por Bob Chapek, ahorrarse cerca de 500 millones de dólares al mes al dejar de pagar a casi la mitad de su fuerza laboral.
Desde hace casi cinco semanas, los parques de Disney se encuentran cerrados al público por la expansión de COVID-19. Suspender la remuneración de miles de empleados es la estrategia que la compañía ha decidido seguir mientras la vuelta a la normalidad sigue pendiente de la evolución de la enfermedad.
La compañía dijo que proporcionará beneficios completos de atención médica para todos los empleados que hayan sido colocados en licencia no remunerada.
Según el Financial Times, sus negocios de parques, experiencias y productos el año pasado generaron casi 7,000 millones de dólares el año pasado, lo que representa casi la mitad de sus ganancias operativas totales.
El segmento de parques y resorts genera ingresos predominantemente por la venta de entradas a los parques temáticos, las estancias en los hoteles, las ventas de comida, bebida y merchandising, venta y alquiler de clubes vacacionales, venta de cruceros.
En 2019, los ingresos de los parques y complejos vacaciones fueron de 21,700 millones de dólares. Esto supuso un incremento de más de 1,200 millones con respecto a la cifra registrada durante el ejercicio anterior, de acuerdo con cifras de Statista.