Las marcas Coca-Cola, Bimbo y Lala se ubicaron una vez más como las más elegidas por los hogares mexicanos en 2021, de acuerdo con la consultora Kantar.
Se trata del décimo año consecutivo en que el refresco de cola encabeza la lista, mientras las marcas de pan y lácteos repitieron sus posiciones por cuarta ocasión.
Coca-Cola fue elegida 1,227 millones de veces de los anaqueles a lo largo del país durante el año pasado, Bimbo fue seleccionada 485 millones de veces y Lala 480 millones de veces.
La consultora apuntó que entre las 10 marcas principales, solo Alpura y Coca-Cola tuvieron aumentos en sus Consumer Reach Points (CPR), el indicador con que Kantar mide la frecuencia con que los consumidores eligen un producto determinado.
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Pandemia modificó hábitos de consumo
El resto del top 10 registró caídas en sus CRP o se mantuvo sin cambios, lo que obedece en gran medida a los cambios de patrones de consumo de los hogares a raíz de la pandemia, explicó Fabián Ghirardelly, director general de la división Worldpanel de Kantar México.
Por la pandemia empezamos a comprar menos frecuentemente por miedo a contagios, llevamos dos años donde se han reducido la cantidad de viajes de compra
dijo el ejecutivo a EL CEO.
Alpura, Nutri, La Moderna, Pepsi, La Costeña, Nescafé y Knorr completan el top 10 del ranking Brand Footprint elaborado por Kantar.
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Para elaborar el ranking la empresa toma en cuenta seis regiones integradas por 20.2 millones de hogares, que representan 82% de la población urbana, y más de 325 marcas.
En su décima edición, Kantar destacó que el número de marcas que los compradores adquieren se ha mantenido constante, en 55 para el hogar medio, por lo que el reto es cómo entrar en la cartera del comprador.
Inflación impactará penetración de marcas
Fabián Ghirardelly comentó que los elevados niveles de inflación observados en los últimos meses también pueden afectar o generar nuevos patrones de compra entre los consumidores mexicanos.
De hecho, en la primera quincena de junio, la inflación se aceleró a 7.88% a tasa anual, lo que representó su mayor nivel para un mismo periodo desde el 2000.
Ghirardelly detalló que aquellas categorías con una inflación superior a la media serán más sensibles a los cambios de consumo y tendrán problemas para mantener sus volúmenes de ventas y participación de mercado.
La gente va a buscar algún mecanismo de ahorro, comprando menos, yéndose a marcas más baratas o formatos más pequeños, va a buscar vías para poder enfrentar este incremento de inflación.
