El derrumbe de los precios del petróleo, una salida forzada de Venezuela y gastos vinculados al despido de miles de trabajadores le costaron a Chevron una pérdida de 8,300 millones de dólares en el segundo trimestre.
La pérdida en la producción de gas y petróleo fue por 5,600 millones de dólares, incluida toda su inversión en Venezuela, donde era la última empresa estadounidense que aún operaba en la industria del crudo.
La producción en el periodo abril-junio cayó en unos 189,000 barriles de petróleo y gas por día en comparación con el año anterior. El flujo de caja fue negativo en 643 millones de dólares, lo que podría afectar sus acciones en el mercado de valores en el corto plazo, de acuerdo con Biraj Borkhataria, analista de RBC Europe Limited.
La pérdida de Chevron fue de 8,270 millones de dólares, o 4.44 dólares por acción, en comparación con una ganancia de 4,300 millones de dólares o 2.27 dólares por acción, reportados en el mismo periodo del año anterior.
La compañía, que reportó sus estados financieros al segundo trimestre este viernes, también informó a los inversionistas que en las pérdidas se incluyen unos 1,000 millones de dólares para cubrir las indemnizaciones por los 6,700 empleados que despidió como parte de su plan de reestructura global.
Hasta antes de los recortes, Chevron presumía una fuerza laboral de 45,000 trabajadores.
Pasarán años para recuperarnos y el precio de nuestros productos está vinculado a la actividad económica
dijo Pierre Breber, director de Finanzas de Chevron, en una entrevista a Reuters.
Chevron planea seguir restringiendo los gastos en nuevos proyectos, afirmó Breber.
La petrolera, al igual que otras compañías energéticas, ha visto además una baja multimillonaria en la operación de sus activos por la pandemia de coronavirus, que aplastó la demanda de combustible en el mundo y generó una acumulación de inventarios de crudo.
Los rivales de Chevron, Total, Royal Dutch Shell y Eni, informaron de amortizaciones de miles de millones de dólares en activos, mientras que BP reportó un impacto de hasta 17.500 millones de dólares.
Por cierto, Pemex reportó pérdidas de 44,000 millones de pesos en este mismo periodo