Carlos Ghosn, quien fue destituido como director general de Nissan, dio sus primeras declaraciones desde que escapó de Japón el pasado 30 de diciembre.
“No escapé de la justicia. Huí de la injusticia y la persecución política”, sostuvo.
El exdirectivo escapó en tren bala para refugiarse en Beirut, Líbano, desde donde pretende llevar el proceso legal por los cargos de malversación financiera; el país presidido por Michel Aoun no cuenta con una ley de extradición.
Acusó que fue considerado culpable desde el primer momento a raíz de la presunta complicidad entre ejecutivos de Nissan con la oficina del fiscal de Tokio y un bufete de abogados.
“Los fondos con los que cuentan los directivos son una línea de contabilidad en el presupuesto” dijo, “yo nunca he firmado un documento en el que se apruebe finanzas personales”.
Después de asegurar que la persecución política parte de la Fiscalía de Japón lo obligó a huir, durante 69 minutos explicó que en los últimos meses fue interrogado -hasta ocho horas al día- sin ningún abogado presente por el supuesto desfalco de millones de dólares.
Carlos acusó a las autoridades judiciales de Japón de múltiples amenazas en contra de su familia e intentos coerción para que se declarara culpable.
“‘Será peor si no confiesas’, me dijo el fiscal una y otra vez y esto ha sido grabado en videos”, aseguró el también ciudadano de Brasil y Francia.
Los motivos de la presunta persecusión
Anteriormente, la defensa de Ghosn acusó a la compañía de fabricar acusaciones que impidieran la integración completa entre Nissan y Renault.
El ejecutivo de 65 años detalló que no propuso una fusión completa Renault-Nissan, sino la creación de un Holding para supervisar las marcas y mantener la independencia de cada una mediante consejos de administración independientes.
“No había confianza y algunos de nuestros amigos japoneses pensaron que la única forma de deshacerse de Renault en Nissan era deshacerse de mí”, dijo.
Además, aseguró que negociaba la inclusión en la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi a Fiat Chrysler, que al final se fue con PSA Group.
“El rendimiento de Nissan comenzó a disminuir debido a que me centré en rescatar a Mitsubishi en 2016, después de 17 años al frente de una empresa que asumí. Había nerviosismo en el nuevo equipo de directivos y CEO de Nissan en Japón por la evolución de las cuentas de la marca”, sostuvo.
De acuerdo con Ghosn, el market cap de Nissan decreció en 10 billones de dólares y el de Renault cinco billones desde su arresto.
Las autoridades de Japón y Turquía, donde Ghosn hizo una breve escala en su viaje a Líbano, investigan el caso. También es objeto de una demanda de arresto de Interpol emitida la semana pasada.
Japón rechaza comentarios de Ghosn
Tras el pronunciamiento del exejecutivo de Nissan, este jueves la ministra de justicia de Japón, Masako Mori, calificó de ‘intolerables’ los comentarios de Carlos Ghosn en su primer pronunciamiento desde su escape hacia Líbano.
“(Ghosn) Está propagando a la comunidad japonesa e internacional información falsa sobre el sistema de justicia de Japón y su práctica. Esto es absolutamente intolerable. El sistema de justicia japonés emplea procedimientos apropiados y está administrado propiamente con el objetivo de esclarecer los casos al mismo tiempo de garantizar los derechos humanos básicos”, señaló.
El escape perpetuado por Ghosn constituye un crimen que no puede ser tolerado, advirtió la ministra en conferencia de prensa.
“Si desea probar su inocencia, debería enfrentarse a un procedimiento justo”, agregó. Además, subrayó que las alegaciones en su contra refieren a crímenes financieros, por lo que ir a juicio supone “una de las características de un hombre de negocios de primera clase y un buen ciudadano”.
Justicia libanesa le prohibe viajar
Este mismo jueves la justicia libanesa prohibió a Carlos Ghosn viajar a otro país, esto luego de que la fiscalía general de Líbano lo interrogara en el marco de una orden de aprehensión de Interpol a pedido de Japón.
La semana pasada, el estado libanés señaló que no tiene un acuerdo de extradición con Japón, pero la justicia de ese país pide su regreso.
De acuerdo fuentes judiciales, la fiscalía optó por prohibir a Ghosn salir del país y pedir su expediente judicial a Japón. En caso de los crímenes por los que está acusado impongan sanciones judiciales en Líbano, será juzgado. Sin embargo, si la legislación libanesa no contempla acción judicial alguna, quedará en libertad.
Con información de AFP y Reuters