Uber sobrevivió en Colombia tras 20 días sin operar debido a un fallo que prohibió su participación en el país sudamericano.
La compañía de transporte privado reanudó sus operaciones este jueves, pero bajo un nuevo modelo de servicio.
“Hemos buscado nuevas alternativas para seguir trabajando por ayudar a conectar a las personas en el país y así responder al apoyo que recibimos de la comunidad en las últimas semanas”, dijo Uber en un comunicado.
“El modelo permitirá arrendar un vehículo con un conductor, bajo un acuerdo entre las partes al momento de la llamada. La aplicación será el punto de contacto que conecta a las dos partes para que entre ellas celebren un contrato”, agregó.
La empresa anunció que ofrecerá cinco opciones de servicio: PorHoras, UberYa, Economy, Comfort y XL, de acuerdo con las necesidades de los usuarios.
La Superintendencia de Industria y Comercio, entidad encargada de proteger la libre competencia y los derechos de los consumidores, dijo en diciembre que Uber violaba las normas que regulan el mercado.
La decisión judicial de diciembre en contra de Uber fue producto de una demanda de una empresa de taxis que consideró que la aplicación tecnológica operaba sin cumplir los requisitos exigidos a las compañías de transporte público de pasajeros.
La empresa tiene registrados más de dos millones de usuarios y 88,000 conductores socios en Colombia.
Las empresas tecnológicas aseguran que las regulaciones de Colombia están desactualizadas y pueden amenazar el estatus del país como segundo destino más popular de la región para este tipo de inversión, después de Brasil.
En Colombia, que carece de una regulación clara sobre el transporte de pasajeros a través de aplicaciones, operan otras empresas como Didi y Cabify.
“En Uber deseamos mantener un diálogo abierto con las autoridades del país para aportar nuestra experiencia a la construcción de un marco normativo moderno que se adapte a las necesidades del entorno”, dijo la empresa que aseguró haber pagado más de 20 millones de dólares en impuestos y tener la intención de ampliar su inversión en el país.
La empresa no se refirió al anuncio previo de someter la controversia que la llevó a suspender su operación en Colombia a un arbitraje internacional, por la violación al tratado de libre comercio con Estados Unidos, y daños que superarían los 250 millones de dólares, según cálculos de Uber.