Manuel Bartlett, director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), dijo en conferencia de prensa que ha habido una campaña en contra del trabajo del presidente Andrés Manuel López Obrador en el área energética por parte de la oposición, la que comenzó al inicio de la administración y que se ha recrudecido con la reciente toma de decisiones. Sin embargo, algunos de sus argumentos no coinciden con la realidad del mercado.
Bartlett destacó que la Reforma Energética impuso a CFE un despacho transitorio en el que sólo se considera el costo variable de la energía y no el costo total, lo que pone a la Comisión en desventaja.
El director dijo que este arreglo impide que se despache el 45% de la energía que CFE produce, lo que le representa una pérdida de 215,000 millones de pesos. Además, la compra de energía representa una pérdida extra de 222,000 millones.
Víctor Ramírez, analista del sector, dijo que esta es una práctica común a nivel mundial que existe porque provoca el surgimiento de plantas de generación cada vez más económicas, mientras que tomar en cuenta los costos unitarios da ventaja a las plantas depreciadas, lo que provoca más problemas a la red y mayores costos de mantenimiento a largo plazo.
Bartlett criticó además que los privados, capaces de producir energía a precios más bajos que CFE, reciban como compensación el precio más caro que haya sido despachado en un periodo de tiempo, sin mencionar que se trata de precios bajos que la CFE no es capaz de igualar.
El director señaló una vez más que la CFE está obligada a comprar la energía eléctrica a generadores privados que no pagan a la Comisión por su respaldo. “El respaldo no existe. El mercado eléctrico funciona ofreciendo energía cuando se tiene, y decir que tienen que pagar cuando no se tiene es ridículo. Ninguna planta aguanta 24 horas al día 365 días al año, y el operador no te obliga a pagar por las horas en las que no tienes energía”, señaló Ramírez.
Bartlett dijo que actualmente, la energía adquirida mediante subastas tiene un costo mayor al precio del mercado. La energía producto de la tercer subasta eléctrica, en su momento, fue reconocida internacionalmente por haber alcanzado costos históricamente bajos a nivel mundial.
“La Reforma Energética convirtió a CFE en trampolín para los intereses privados. Se obliga a CFE a comprarle energía a los productores independientes. Estos productores vienen de la ley de Salinas, cuando negoció el Tratado de Libre Comercio”, dijo el director de la compañía.
Bartlett dijo que, previo a la entrada en vigor de la Reforma Energética, CFE no tenía la necesidad de permitir la entrada de generadores privados al país. Sin embargo, analistas han señalado que la situación económica de la compañía no garantiza que existan fondos suficientes para financiar los proyectos de generación requeridos por la creciente demanda eléctrica nacional.
“Esto es falso y tan no era así que había proyectos de Productores Independientes de Energía desde los 90. El Estado no tiene capacidad financiera para invertir y aunque la tuviera resultaba caro y poco competitivo” dijo Ramírez, quien recordó que Bartlett, como senador, introdujo una controversia constitucional contra la figura de PIEs, la cual perdió.
El director de CFE Energía, Guillermo Nevárez Elizondo, destacó que muchos negocios pagan tarifas de energía menores a las que pagan los hogares subsidiados, y se refirió a esta situación como “subsidios”.
Existe un error de concepto: estas empresas tienen plantas de generación o son socios de plantas más eficientes. El sólo hecho de pasar a media tensión te disminuye costos, es un asunto tecnológico. Se debería estar buscando que todos paguemos menos, y no que quien adquiera barato pague más,
dijo Ramírez
El especialista advirtió que la peor parte es que CFE da el mensaje de que no quiere modernizarse y busca que los mexicanos paguemos las ineficiencias de tener instalaciones viejas en operación. “Si se logra cristalizar su iniciativa vamos a retrasarnos décadas”, lamentó.