Para expresar sus preocupaciones o para mostrar su apoyo, empresarios se han reunido con el presidente Andrés Manuel López Obrador desde que tomó posesión. Y para el recuerdo se han tomado la foto al lado del mandatario.

La más reciente reunión que sostuvo el presidente fue con el director de DHL para América y directivos de México, Mike Parra, quien le informó que invertirán 300 millones de dólares y crearán 3,500 empleos en el país.

A finales de junio, empresarios jaliscienses se reunieron con el Ejecutivo federal para hablarle de obras prioritarias para el estado, como la Línea 3 del Tren ligero, y de preocupaciones con respecto a apoyos, programas y la economía nacional.

A mediados de julio, López Obrador se reunió con empresarios de Nuevo León, encabezados por el presidente de la Cámara de la Industria de Transformación (CAINTRA), Adrián Sada Cueva, para tratar temas de inversiones regionales y el aumento de la producción en el estado.

A finales de julio el presidente se reunió en la casa del presidente de Grupo Bal, Alberto Baillères, junto a otros empresarios.

“Me invitaron a comer a casa del señor Alberto Baillères, 10 empresarios, desde luego Slim, Germán Larrea, Servitje, Antonio del Valle, así 10. Fue un encuentro respetuoso, agradable”, reveló en conferencia de prensa el primero de agosto.

También a finales del mes pasado, López Obrador se reunió en Palacio Nacional con empresarios del sector industrial, así como dirigentes de asociaciones y cámaras de Michoacán.

A la reunión asistieron empresarios como el presidente de Grupo Fame, Francisco Medina Chávez; Alfonso Gómez Sanz, empresario del sector industrial, financiero y hotelero; el director general de Grupo Capital, Juan Pablo Arroyo Abraham, y Héctor Sistos Rangel, empresario del sector industrial.

El tabasqueño también se ha reunido con figuras como el presidente y director de operaciones de Goldman Sachs, John E. Waldron; el editor en jefe de Bloomberg, John Micklethwait; el presidente mundial de Grupo BBVA, Carlos Torres Vila; directivos de Bank of America, representantes de las empresas Bombardier y Safran, así como al director global de IKEA, Christian Rojkjaer.