Airbus anunció el jueves una utilidad neta de 2,200 millones de euros (2,600 millones de dólares) en el primer semestre gracias a las entregas de aviones y elevó sus previsiones para el año. 

El fabricante aeronáutico europeo entregó 297 aviones entre enero y junio, frente a los 196 del año pasado.

Como resultado de este buen rendimiento en términos de entregas —el momento en que el cliente paga la mayor parte de la factura—, la facturación se disparó un 30%, hasta los 24,600 millones de euros (29,100 millones de dólares).

El presidente ejecutivo Guillaume Faury  comentó que los resultados pusieron a la compañía “en condiciones de elevar nuestras previsiones para 2021, a pesar de que el contexto sigue siendo imprevisible”.

El fabricante espera ahora entregar 600 aviones a lo largo del año, frente a la previsión anterior de una cifra equivalente a la de 2020 (566), que la mayoría de los analistas consideraban conservadora. 

También espera un beneficio operativo de 4,000 millones de euros (4,700 millones de dólares), el doble de su objetivo anterior. 

El tráfico aéreo mundial sigue gravemente limitado por la pandemia de COVID-19 y solo el transporte de mercancías supera su nivel anterior a la crisis.