Adeudos de Pemex paralizarían al sector petrolero a partir de julio

Adeudos de Pemex paralizarían al sector petrolero a partir de julio

El problema no se limita a la falta de recursos, sino también a trabas administrativas. Empresas del sector reportan severas dificultades para facturar servicios ya prestados, debido a fallas y restricciones en el sistema COPADE.

A partir de julio, una parte importante del sector de servicios petroleros dejaría de operar debido a la falta de pagos por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex). La situación financiera de las empresas proveedoras es insostenible, y los trabajos asociados a la exploración y producción podrían frenarse, advierte la Asociación Mexicana de Empresas de Servicios Petroleros (Amespac).

En la actualidad atravesamos una crisis sin precedentes, propiciada por la falta de pagos de nuestros servicios y un pronunciado desplome presupuestal

señala Rafael Espino de la Peña, presidente de la Asociación.

Trabas administrativas

El problema no se limita a la falta de recursos, sino también a trabas administrativas. Empresas del sector reportan severas dificultades para facturar servicios ya prestados, debido a fallas y restricciones en el sistema Copade (Codificación de Pagos y Descuentos). Esto ha generado un cuello de botella que mantiene retenidos pagos por más de 50,000 millones de pesos, algunos con una antigüedad superior a 12 meses.

Empresarios del sector afirman que muchas compañías ya no podrán sostener operaciones a partir del próximo mes, pues sus flujos de caja están completamente comprometidos.

Ante este escenario, Amespac ha solicitado al gobierno federal la instalación urgente de una mesa de trabajo con autoridades facultadas para tomar decisiones. El objetivo es atender tres puntos fundamentales: la liberación inmediata de facturación pendiente de 2024, el aseguramiento de pagos puntuales en 2025 y un programa de liquidación de adeudos históricos.

Desde la asociación reiteran su disposición para seguir colaborando con Pemex, pero insisten en que sin pagos no hay operación posible. La crisis del sector no solo impacta a las empresas proveedoras, sino que pone en riesgo los objetivos energéticos de la nueva administración federal.

La respuesta del gobierno será crucial. De ello dependerá si México logra sostener su producción petrolera en los próximos meses o si, por el contrario, entra en una nueva etapa de declive operativo.

Deuda de Pemex

Según cifras oficiales de la petrolera, al primer trimestre de 2025, la deuda con proveedores ascendía a 404,000 millones de pesos, lo que representa un aumento de 260% en comparación con 2018. Este endeudamiento ha provocado un efecto dominó en toda la cadena de suministro de servicios petroleros.

A esta situación se suma un recorte del 66% en el presupuesto de Exploración y Extracción, que pasó de 373,000 millones de pesos en 2024 a tan solo 127,000 millones en 2025. Como resultado, actualmente operan únicamente 26 de los 59 equipos de perforación que estaban activos el año anterior, lo que ha reducido drásticamente la capacidad operativa del sector.

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