Lo que parecía ser una semana de ensueño para los mercados emergentes, el viernes se convirtió en una pesadilla.
A mitad de semana, la Reserva Federal fue clara: no se van a subir las tasas de interés en lo que resta del año. Lo anterior fue tomado por los inversionistas como una señal para adquirir posiciones en mercados y monedas de países emergentes, como México.
En dos sesiones (miércoles y jueves) el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores avanzó 2% y marcó su nivel más alto en un mes al alcanzar las 43,251.19 unidades. En tanto que el tipo de cambio también estaba de manteles largos y llegó a cerrar en 18.8270 pesos por dólar.
El viernes se terminó el encanto. El IPC se desfondó 2% y el tipo de cambio regresó a niveles de 19 pesos por dólar al perder 1.13% en una jornada.
Los factores que inyectaron aversión al riesgo hacia todos los emergentes fueron malos datos económicos en Alemania, la potencia económica de Europa, y Turquía.
El banco central de Turquía endureció su postura monetaria y quiere obligar a los bancos a usar ventanas de financiamiento más caras con tasas de interés de 25.5% y 27%, de acuerdo con información de Bloomberg.
El banco central hace este movimiento mientras sus reservas internacionales se redujeron –en dos semanas– en 6,300 millones de dólares para cerrar el 15 de marzo en 28,500 millones de dólares.
La preocupación sobre Turquía llevó a la lira a ser el viernes la moneda con el peor desempeño del mundo, luego de que se depreció más de 6%.
Las consecuencias
Los riesgos latentes en la economía obligaron a los inversionistas a refugiarse en activos como el dólar. El índice DXY, que mide el desempeño del dólar frente a las monedas más importante del mundo, avanzó a 96.60 unidades.
El fortalecimiento del dólar puede venir más por un debilitamiento del euro (por temas como el Brexit) y por la caída de monedas emergentes (como Turquía). Ahora el DXY buscará niveles de 97 y 98 unidades
dijo Juan Francisco Caudillo, analista técnico senior de Grupo Financiero Monex.
Si el DXY avanza, significa que el dólar se apreciará ante la mayoría de las monedas y muy probablemente el peso estará entre ellas.
El peso retomó el nivel de 19.0980. El problema es que el momentum de mediano plazo apunta a que se seguirá depreciando. Toda la apreciación que tuvo la moneda mexicana (los días anteriores) fue de corto plazo. Ahora, lo más probable es cotice en 19.22 pesos por dólar y se vaya a la zona de 19.50 pesos por dólar
comentó Pattie Jabbaz, fundadora de pattiejabbazconsulting.com.
En Alemania, el Índice PMI de manufactura cumplió tres meses por debajo del umbral de 50 puntos, lo que puede apuntar a una contracción económica, y se ubicó en su nivel más bajo desde agosto del 2012 en 44.7 unidades.
Lo anterior reafirma la idea que Europa se desacelera de manera importante y la preocupación de que llegue a recesión toma fuerza. Alemania es el principal motor económico que tiene Europa y el cuarto país más importante del mundo.