El peso mexicano se apreció ante el dólar al cierre de operaciones de este jueves, dejando atrás la racha negativa registrada esta semana, mientras los inversionistas siguen buscando pistas sobre los próximos movimientos para las tasas de interés en México y Estados Unidos.
De acuerdo con datos de Banco de México (Banxico), la moneda nacional finalizó la sesión con una ganancia de 0.23% frente al dólar; mientras que el tipo de cambio cerró en 17.1901 unidades por divisa estadounidense.
Con ello, el peso cortó la mala racha de tres jornadas cediendo terreno ante el dólar; sin embargo, todo apunta a que cerrará una semana con pérdidas ante el billete verde.
Durante las operaciones del día, el peso tocó un mínimo de 17.15 y un máximo de 17.23 pesos por divisa estadounidense, según datos de Bloomberg.
Al menudeo, el billete verde se vende en 17.60 pesos en ventanillas de Citibanamex, 6 centavos más barato que al cierre de la jornada anterior.
El índice dólar, que mide el desempeño de la divisa frente a una canasta de las seis monedas más operadas, sube 0.05% para ubicarse en 103.50 unidades.
Peso atento a las tasas de interés
Los inversionistas han reducido sus esperanzas de que el primer recorte a las tasas de interés por parte de Banxico y la Reserva Federal (Fed) llegue durante el primer trimestre del año, indicaron analistas de Monex.
En este momento, los mercados estiman una probabilidad cercana a 52% sobre un recorte en las tasas de interés durante la reunión de marzo, por debajo del 63% esperado anteriormente.
De acuerdo con CI Banco, la próxima determinación de los bancos centrales para la tasa de referencia dependerá de la evolución que muestren los datos económicos en ambos países.
Las solicitudes iniciales de desempleo en Estados Unidos retrocedieron inesperadamente a 187,000, el nivel más bajo desde septiembre del año pasado, lo que subraya la fortaleza del mercado laboral, mientras que los permisos de construcción y la construcción de viviendas superaron las previsiones.
Comentarios de miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) y datos de la economía estadounidense dan pie para pensar que el banco central de aquel país no lleva prisa por recortar la tasa de interés.
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