El peso cortó una racha de cuatro días con apreciaciones ante el dólar este miércoles, tras la decisión de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).

En su cotización interbancaria, el dólar cerró en 19.9970 pesos, una depreciación de 0.14% de la moneda mexicana, o tres centavos por encima de la jornada previa, de acuerdo con datos de Banco de México.

El tipo de cambio tocó un máximo de sesión de 20.0329 pesos por dólar después de conocerse la decisión de la Fed, pero recorta las pérdidas y cotiza en un nivel de 19.9874 unidades por divisa estadounidense, según Bloomberg. 

Al menudeo, el billete verde se vende en 20.47 pesos en ventanillas de Citibanamex, un centavo más caro que ayer.

El índice dólar, que mide el desempeño de la divisa frente a una canasta de las seis monedas más operadas en el mercado, retrocede 0.11%, a 92.338 unidades, con lo que borra las ganancias previas de la jornada.

El Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed concluyó este miércoles una reunión de dos días en la que decidió mantener sin cambios su tasa de interés de referencia.

La Fed tampoco dio indicaciones sobre un endurecimiento de su política monetaria, pues dijo seguirá evaluando los avances de la economía, la estabilidad de la inflación y el progreso del mercado laboral antes de reducir sus estímulos, lo que puede suceder tan pronto como este año.

“La economía ha progresado hacia los avances en el mercado laboral que la Fed quiere ver antes de reducir sus compras mensuales de bonos por 120,000 millones de dólares”, señaló el banco central en un comunicado.

En noticias relevantes, la agencia calificadora Moody’s recortó la calificación crediticia de Pemex de ‘Ba2’ a ‘Ba3’, tres niveles por debajo de grado de inversión, y mantuvo a la deuda de la petrolera estatal con perspectiva negativa.

Cabe destacar que el tipo de cambio no reaccionó al recorte de la calificación crediticia de Pemex debido a que ya se esperaba y además desde el 2020 había perdido el grado de inversión

de acuerdo con Banco Base

En los mercados accionarios, los índices de México y Estados Unidos operan mixtos, con la atención puesta en la avalancha de reportes trimestrales de las empresas.