La guerra comercial entre Estados Unidos, con buena parte del mundo, y el temor latente de una recesión económica no han logrado frenar el desempeño accionario de los mercados emergentes, en especial de los denominados BRICS.

Los principales índices accionarios de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica (BRICS) tienen rendimientos positivos en lo que va de 2019, donde destaca lo hecho por Rusia y China.

En estos últimos casos, el índice ruso Moex y el chino CSI 300 tiene rendimientos en dólares de más de 25%, y en moneda local por poco más de 20%.

Los BRICS deben considerarse como una inversión de alto riesgo. Sin embargo, por ser mercados emergentes presentan una estrecha correlación y el inicio de una tendencia para uno de estos países podría representar el cambio de tendencia para los demás

dijo Santiago Cortés, analista independiente.

En 2001, el economista Jim O’Neill creó el concepto BRICS para hacer notar la importancia de estos cinco países para el mundo. O’Neill fue presidente de Goldman Sachs Asset Management, ministro del Tesoro del Reino Unido y, actualmente, es vicepresidente de Northern Powerhouse Partnership y miembro de la Comisión de Vivienda Social de Shelter.

Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica representan más de 40% de la población mundial y aportan casi un tercio del Producto Interno Bruto global. De acuerdo con el estudio ‘El papel de los BRICS en la economía y desarrollo internacional’, se espera que estos países representen más de la mitad del crecimiento económico mundial hasta 2030.

“Los BRICS pueden ayudar a avanzar en el desarrollo económico y social mundial. Es probable que la cooperación para lograr objetivos comunes sea una característica clave del desarrollo internacional en las próximas décadas”, dice el estudio.

Pese a la hecho por los mercados de China y Rusia hasta este momento, no se pueden descartar los riesgos que pesan sobre ambos países.

Las presiones

China registró en el tercer trimestre de 2019, su menor crecimiento en 27 años, que fue de 6%. Además, mantiene una guerra comercial con Estados Unidos pese a que Donald Trump, presidente estadounidense, anunció el 11 de octubre un acuerdo parcial con China que abarca temas como agricultura, divisas y de protección de propiedad intelectual.

En un primer momento Trump dijo que él y el líder chino Xi Jinping podrían firmar un acuerdo durante la cumbre del Asia-Pacífico de noviembre, en Santiago de Chile. El 21 de octubre, Wilbur Ross, secretario del Comercio, dijo a la cadena Fox Business Network que el acuerdo “tiene que ser correcto y no tiene que ser en noviembre”.

También hay fricciones por la aprobación de la Ley de Democracia y Derechos Humanos de Hong Kong, en la Cámara de Representantes, a mediados de octubre.

La ley, que consiste en poner fin al estatuto comercial especial de Estados Unidos para Hong Kong a menos que se verifique cada año que se respetan los derechos humanos en la isla, fue criticado por China. El debate sobre la ley pasará al Senado.

Las afectaciones de la guerra comercial no se quedan exclusivamente entre China y Estados Unidos.

Si la economía del gigante asiático se debilita, uno de los principales afectados será Rusia, por la cantidad de negocios e inversiones que mantienen entre sí.

Uno de los puntos más sensibles para Rusia y empresas petroleras como Rosneft, Lukoil, Gazprom Neft, entre otras, es que la desaceleración económica sea más profunda a lo esperado. Lo anterior afectaría el consumo de crudo a nivel mundial, uno de los principales activos que tiene Rusia, impactando a su economía y principales compañías.

México, en cuarta posición

El mercado accionario mexicano se encuentra apenas por arriba de lo hecho por los índices de Sudáfrica e India, pero muy rezagado al compararlo con Rusia o China.

Será necesaria una combinación de menores tasas de interés, como es esperado hacia delante, y un aumento en la actividad económica nacional para entonces, posiblemente tener las condiciones para estimar un rally más sostenido de la renta variable local

dice Citibanamex en un reporte.

México se ha enfrentado a distintas presiones durante los últimos meses: el retraso en la ratificación del acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá, ahora llamado T-MEC; la guerra comercial entre Estados Unidos y China, así como el magro crecimiento económico que tendrá la actividad nacional este año, donde difícilmente logrará romper la barrera de 0.5%.

“Sugerimos buscar valor a través de alternativas tácticas de inversión y tomar decisiones con base en la valuación de nombres en lo particular bajo un horizonte patrimonial”, publicó Citibanamex.