Robinhood, plataforma de operaciones de compra y venta de acciones, está bajo investigación en Estados Unidos por su falta de transparencia sobre su práctica de vender órdenes de los clientes a operadores de alta frecuencia.

La investigación de la Comisión de Bolsa y Valores se encuentra en una etapa avanzada y podría resultar en una multa de más de 10 millones de dólares si la compañía acepta llegar a un acuerdo, informó The Wall Street Journal.

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El flujo de órdenes de venta no es ilegal. Sin embargo, la mayor parte de los ingresos totales de Robinhood proviene de la práctica de venta a operadores.

Robinhood obtuvo 180 millones de dólares en ingresos de trading en el segundo trimestre, aproximadamente el doble que el trimestre anterior, ya que los inversionistas acudieron en masa a la plataforma en busca de aprovechar el rebote histórico del mercado.

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Nos esforzamos por mantener relaciones constructivas con nuestros reguladores y cooperar plenamente con ellos. No discutimos ni comentamos nuestras comunicaciones con nuestros reguladores

dijo a CNBC un portavoz de Robinhood.

La SEC se negó a comentar.

La aplicación favorita de los millennials, que ofrece operaciones sin comisiones, registró un histórico de 3 millones de cuentas nuevas en los primeros cuatro meses de 2020.