Los precios del petróleo perdieron más de 20% de su valor en 2020, debido a que los estrictos confinamientos por el coronavirus paralizaron gran parte de la economía mundial.
Respecto al último cierre de 2019, el WTI de Estados Unidos perdió 20.5%, su caída más profunda en dos años, mientras que el Brent del Mar del Norte retrocedió 21.5%, para terminar su peor año desde 2015, de acuerdo con MarketWatch.
Este jueves, el WTI para entrega en febrero avanzó 0.3%, a 48.52 dólares por barril, y el contrato de marzo del crudo Brent ganó 0.3%, a 51.80 dólares.
El petróleo sufrió su primer revés a inicios del año, cuando Arabia Saudita y Rusia tuvieron una ruptura que llevó a una guerra de los precios, lo que resultó en una ola de pánico en el mercado.
Luego, la propagación de la pandemia de COVID-19 y las restricciones a los viajes, que limitaron la demanda por combustibles, llevaron al WTI a entrar en territorio negativo por primera vez en su historia durante abril.
Desde entonces, los referenciales registran una lenta recuperación, pese a que han duplicado su valor.
Es un fin de año tranquilo, pero un dólar más débil está ayudando a mantener un piso por debajo de los mercados
dijo Stephen Innes, estratega jefe de mercado global de Axi
El dólar cierra el año en una espiral descendente, debido a que los inversionistas ponen más dinero en activos de riesgo y Estados Unidos imprime más dinero para financiar su creciente déficit presupuestario y comercial.
Los mercados mundiales de materias primas están preparados para finalizar 2020 con un buen balance, ante la recuperación de la demanda y los paquetes de estímulo generalizados que impulsan los precios.
La distribución de vacunas para combatir al coronavirus y los billones de dólares en apoyo fiscal fomentarán la inversión y el gasto en 2021. A corto plazo, es probable que las preocupaciones sobre los confinamientos limiten las ganancias.
Una nueva variante del virus en Reino Unido ha llevado a la reimposición de restricciones al movimiento, afectando la demanda de petróleo a corto plazo y pesando sobre los precios, mientras que las hospitalizaciones y las infecciones han aumentado en partes de Europa y África.
En lo relativo a la oferta, las empresas de energía estadounidenses registraron el mayor aumento trimestral de plataformas activas desde el segundo trimestre de 2017, según datos de Baker Hughes.
OPEP, un impulso
El próximo gran motor del precio del petróleo será una reunión del 4 de enero de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados, incluida Rusia, un grupo conocido como OPEP+, que debatirá la necesidad de elevar la producción a partir de febrero.
La OPEP+ implementó una serie de recortes récord a la producción desde mayo, lo que aminoró las tensiones entre Arabia Saudita y Rusia, además de evitar un exceso de oferta.
A inicios de este mes, el grupo acordó comenzar a incrementar la producción gradualmente desde enero, pero ha subrayado la necesidad de continuar apoyando al mercado en caso de un nuevo desequilibrio.
Con información de Reuters