Los precios del petróleo bajaron este jueves, luego de que la debilidad del dólar y una caída de los inventarios en Estados Unidos no lograron contrarrestar los temores sobre nuevos brotes de coronavirus y retrasos en la distribución de vacunas.
El contrato de marzo del WTI de Estados Unidos perdió 1%, a 52.34 dólares por barril, y el Brent del Mar del Norte para entrega en marzo, que expira el viernes, 0.5%, a 55.53 dólares, de acuerdo con MarketWatch.
El miércoles, los precios del petróleo fueron respaldados por datos que mostraron un descenso de casi 10 millones de barriles en los inventarios de crudo de Estados Unidos la semana pasada, que según analistas se debió a un repunte en las exportaciones de crudo y una caída en las importaciones.
Pero la atención vuelve a la demanda, a medida que las variantes más contagiosas del COVID-19 provocan un aumento de las infecciones. Se espera que una distribución más lenta de las vacunas en Europa y las restricciones de viaje en China limiten el consumo de combustible.
Cualquier tipo de optimismo relacionado con la demanda permanece en pausa en medio del aumento continuo de nuevos casos de COVID-19 en centros de demanda clave y las restricciones a la movilidad y actividades públicas
dijo la consultora JBC Energy
Los controles de vacunas más estrictos por parte de la Unión Europea y los retrasos en las entregas de AstraZeneca y Pfizer han ralentizado el proceso de distribución.
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En tanto, el índice dólar cayó tras cotizar en terreno positivo durante la mayor parte de la jornada, lo que debilitó a los petroprecios.
La economía de Estados Unidos se contrajo en 2020 a su tasa más pronunciada desde la Segunda Guerra Mundial, con estragos causados por el COVID-19 en firmas de servicios como restaurantes y aerolíneas, y dejando a millones de personas sin trabajo.
China, el segundo mayor consumidor de petróleo del mundo, enfrenta un aumento en los contagios y busca limitar los viajes a medida que se acerca a lo que normalmente es la temporada de mayor cantidad de desplazamientos del año, las vacaciones del Año Nuevo Lunar.
El Ministerio de Transporte de China pronostica que la cantidad de viajes aumentará 15% con respecto al año pasado, durante la primera fase de la pandemia, pero que se reducirán 40% en comparación con las cifras de 2019.
Con información de Reuters