Los precios del petróleo bajaron desde máximos de ocho meses, con lo que interrumpieron su racha alcista, en medio de señales de aumentos de suministros que generan temores sobre la recuperación de la demanda.
El contrato de enero del WTI de Estados Unidos perdió 1.58%, a 44.99 dólares por barril, y el Brent del Mar del Norte cayó 1.67%, a 47.80 dólares, de acuerdo con Bloomberg.
La sesión estuvo marcada por un menor volumen de comercialización en Estados Unidos debido a las celebraciones por el Día de Acción de Gracias.
Los futuros del Brent escalaron hasta casi 50 dólares esta semana, luego de que tres grandes farmacéuticas anunciaron progresos en vacunas contra el COVID-19 que podrían facilitar el comienzo de la inmunización antes de que finalice el año.
Las recientes ganancias del WTI han llevado al referencial a registrar una ganancia de 26% en lo que va de noviembre, la mayor desde mayo de este año.
A pesar de que hubo varios fundamentos del mercado importantes que hicieron subir los precios, especialmente el desarrollo de una vacuna, lo que apoya al crudo, persiste la tendencia bajista
dijo Avtar Sandu, operador de materias primas de Phillip Futures
Los confinamientos por una fase más crítica de la pandemia, el creciente número de plataformas de extracción activas en Estados Unidos, junto con una mayor producción de Libia, son factores de riesgo para los inversionistas con grandes posiciones alcistas, afirmó.
Los inventarios de petróleo de Estados Unidos bajaron en 754,000 la semana pasada. Analistas encuestados pronosticaban un alza de 127,000 barriles. Los inventarios del WTI en el centro de acopio de Cushing, Oklahoma, cayeron en 1.7 millones de barriles, según datos del gobierno.
Pero la demanda de gasolina en la semana descendió en 128,000 barriles por día a 8.13 millones de barriles por día, el menor nivel desde junio, indicó la Administración de Información de Energía.
También pesa sobre los precios una recuperación del dólar desde mínimos de agosto. La fortaleza de la divisa reduce el atractivo por materias primas consideradas riesgosas, como el petróleo.
El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, pidió a los ciudadanos que se abstengan de hacer grandes reuniones, que usen mascarilla y mantengan el distanciamiento social, durante las celebraciones por el Día de Acción de Gracias.
En las últimas dos semanas, ese país añadió 2.3 millones de contagios por COVID-19, para llevar su total a 12.8 millones, muestra el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
El mercado aguarda la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados de la próxima semana, en la que se espera que decidan mantener los niveles de recortes a la producción actuales.
La OPEP+, como se conoce al grupo, planea dar marcha atrás a sus planes de incrementar el bombeo a partir de enero debido a un acelerado crecimiento de la producción de Libia y ante la reciente alza de infecciones.
Con información de Reuters