La percepción de riesgo sobre Petróleos Mexicanos (Pemex) cayó 47% en una jornada, sin embargo, los problemas a los que se enfrenta la petrolera se mantienen.
El riesgo sobre Pemex, medido a través de los Credit Default Swaps (CDS) a cinco años, se ubica en 488.17 puntos este miércoles, su nivel más bajo desde el 9 de marzo, de acuerdo con datos de Bloomberg. Una sesión antes, los CDS se ubicaban en 929.14 puntos.
Los CDS son una especie de seguro en contra del impago de un bono emitido, es decir, son vistos como un barómetro del riesgo de incumplimiento.
La Secretaría de Hacienda otorgó un estímulo fiscal a los asignatarios de Pemex que estén obligados al pago del derecho por la utilidad compartida y a pagos provisionales. Dicho estímulo es por un monto de 65,000 millones de pesos, de acuerdo con lo publicado el 21 de abril, en el Diario Oficial de la Federación.
Pese a la caída de la percepción de riesgo, la cotización de los CDS de Pemex a cinco años se mantienen por encima de su promedio de 2010 a la fecha, que es de 207.39 puntos.
El estímulo busca promover beneficios adicionales con la finalidad de generar condiciones que permitan cumplir compromisos establecidos en actividades de exploración y extracción de hidrocarburos. Sin embargo, después de que el precio de la mezcla cotizó por primera vez en terreno negativo, el presidente (López Obrador) anunció que se tomarán medidas para producir menos petróleo a través del cierre de pozos nuevos
publicó Citibanamex en una nota.
El 20 de abril, el precio de la Mezcla Mexicana de Exportación cerró en un precio negativo de 2.37 dólares por barril al caer 14.37 dólares, en línea con el crudo referencial WTI.
Uno de los principales factores que influyó un precio negativo fue el ‘efecto contango’. El que no haya suficiente espacio de almacenamiento es, en gran medida, lo que causó que los operadores cerraran sus posiciones sobre los futuros del petróleo.
Sobre Pemex, lo único que puede mejorar la perspectiva de es revisar qué divisiones no pierden dinero y reestructurar la empresa, comentó Amín Vera, director de análisis económico de Black WallStreet Capital.
Pemex perdió el grado de inversión la semana pasada. Fitch Ratings quitó primero el grado de inversión a la petrolera mexicana, el 6 de junio del 2019, y Moody’s, el 17 de abril, rebajó a Ba2 desde Baa3 la nota sobre Pemex.
Para que un gobierno o empresa pierda su grado de inversión, al menos dos calificadoras deben de coincidir. Una rebaja en la calificación significa que existe más probabilidad de incumplimiento de pago, por parte del emisor.
En la escala de Moody’s, Pemex tenía grado de inversión desde el 7 de marzo de 2002, mientras que, con Fitch, el grado inversión lo obtuvo el 15 de enero de ese año.
En estos momentos ya no es relevante los niveles de producción o los precios de los bonos, sino un eventual anuncio de reestructura e ir monitoreando el monto de los pasivos de Pemex, dijo Vera.