El oro alcanzó su nivel más alto desde abril del año pasado, al cotizar en 1,350 dólares la onza, apuntalado por una serie de datos económicos débiles de Estados Unidos y China aunado a las tensiones por el ataque a buques petroleros en el Golfo de Omán.
El lingote de oro ha ganado 1.1% en lo que va de esta semana y está en vías de hilar su cuarta semana consecutiva de alzas.
“En la mente de las personas hay una percepción de que el panorama macroeconómico sea más sombrío, en particular ante la posibilidad de que Estados Unidos tenga tasas de interés más bajas dentro de poco”, dijo el CEO de Sharps Pixley -casa de lingotes británica- Ross Norman.
Ante este escenario, los inversionistas se adelantan y compran más oro, pues están a la expectativa de que la Reserva Federal (Fed) decida revertir su política monetaria la próxima semana, lo que tendrá un efecto bajista sobre el dólar e impulsará al oro, explicó Norman.
“Se espera que el oro brille a medida que los inversionistas se apresuran a los activos de refugio seguro”, dijo en una nota el analista de investigación de FXTM, Lukman Otunuga.
Debilidad en China y EU
El crecimiento de la producción industrial de China se desaceleró a un mínimo de más de 17 años en mayo y creció 5%, la última señal de debilitamiento de la demanda en la segunda economía más grande del mundo a medida que Estados Unidos incrementó la presión comercial.
“Es un indicador de que la guerra comercial con Estados Unidos está haciendo que las actividades secundarias en China pierdan dinamismo, lo que a su vez se reflejará en un menor crecimiento económico global, lo cual es malo para los países productores de materias primas”, dijo la directora de análisis económico financiero de Banco Base, Gabriela Siller.
En tanto, en el mercado laboral estadounidense se registró un aumento inesperado en el número de solicitudes de desempleo en la última semana. Los pedidos iniciales de beneficios estatales por desocupación subieron en 3,000 a una cifra desestacionalizada de 222,000 en la semana que terminó el 8 de junio, dijo el jueves el Departamento del Trabajo.
Otro factor es la tensión por los presuntos ataques a dos buques petroleros en el Golfo de Omán cerca del Estrecho de Hormuz por donde pasa una quinta parte del consumo mundial de petróleo de los Productores de Oriente Próximo.
Estados Unidos acusa a Irán por los supuestos ataques, mientras que el Mando Central de Estados Unidos publicó un video de lo que según afirman es una patrulla de los Guardianes de la Revolución -ejército del régimen Iraní- en el cual se observa el retiro de una mina que no estalló en uno de los buques.
“Irán es responsable de los ataques en el Golfo de Omán”, dijo el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo.
El presidente de Irán, Hasán Rohani acusó a Washington de ser una grave amenaza para la estabilidad regional y mundial.
Con información de Reuters y AFP