El oro, un valor refugio en periodos de incertidumbre, alcanzó este lunes su precio más alto desde 2013, resultado de las tensiones en Medio Oriente.
Desde el viernes 3 de enero, tras el asesinato del general iraní, Qasem Soleimani, ordenado por Trump, el precio del oro repuntó y durante las primeras horas de este lunes avanza 1.8% a 1,588.13 dólares la onza, su precio más alto desde abril de 2013.
En periodos de incertidumbre política y financiera no hay nada mejor que comprar oro y, aunque los datos parecen mostrar compras excesivas, la tendencia podría seguir mientras la incertidumbre siga siendo elevada,
señaló el analista de FXTM, Husein Sayed.
En la escalada de las tensiones, Trump amenazó con sanciones contra Irak el domingo después de que el parlamento pidiera la salida de las tropas estadounidenses y extranjeras.
Irán indicó además que reduciría los límites para el enriquecimiento de uranio, alejándose más de los compromisos adquiridos en un acuerdo nuclear de 2015.
“Si (el oro) rompe el nivel de resistencia clave de 1,585 dólares, conduciría al nivel psicológico clave de 1,600 dólares”, afirmó el analista de Phillip Futures, Benjamin Lu.
En el mismo sentido, Goldman Sachs mantuvo su proyección a tres, seis y 12 meses para el oro en 1,600 dólares la onza, afirmando que escoger oro es la opción inteligente en estos momentos.
El oro es una mejor cobertura ante los riesgos geopolíticos
en comparación con el petróleo, dijo el jefe global de investigación sobre commodities en Goldman Sachs, Jeffrey Currie.
“La variedad de escenarios potenciales es muy grande; van desde perturbaciones a la oferta de petróleo o incluso destrucción de la demanda de crudo, lo que sería negativo para los precios del petróleo”, dijo el banco en una nota a clientes titulada “El oro es una mejor cobertura que el petróleo”.
En tanto, los precios del crudo trepaban 2% el lunes y el Brent superó el umbral de 70 dólares, luego del cruce de amenazas entre Estados Unidos e Irán durante el fin de semana.
Los futuros del WTI ganaban 1.17%, a 63.79 dólares el barril, después de haber tocado anteriormente los 64.72 dólares, su máximo nivel desde abril.
Con información de Reuters y AFP