Las advertencias de los reguladores sobre el uso de criptomonedas no impidieron que Fibra GDL realizara la primera transacción con bitcoin en México para la compraventa de un departamento; inclusive, sus directivos no temen las repercusiones.

El 30 de junio, Fibra GDL cerró la venta de un inmueble en la que se aceptó un bitcoin equivalente a 700,000 pesos, a modo de enganche. El departamento ubicado en Ajijic, Jalisco, tiene un valor total de más de 4.2 millones de pesos.

La operación se produce en momentos en que Banco de México (Banxico), la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) hacen énfasis en que las criptomonedas no son consideradas como divisas de curso legal bajo el marco vigente.

Para Enrique Figueroa, CEO de Fibra GDL, la aceptación de bitcoin como método de pago alternativo no implica que estén violando la ley, y espera que más empresas del sector inmobiliario repliquen lo que realizó su firma, originaria de Guadalajara.

Nos da mucho gusto estar en la lupa de ellos (los reguladores). Nos genera mucha tranquilidad y nos da certidumbre de que vamos bien, en el hecho de que esto tiene que cambiar

comentó en entrevista con EL CEO

Fibra GDL tiene un exchange a través del cual acepta bitcoin y otras criptomonedas como dogecoin y ethereum en las transacciones de sus desarrollos. En la actualidad tiene establecimientos como cadenas de comida, gimnasios y restaurantes ubicados en Jalisco, Baja California y Quintana Roo en los que ya incluyen bitcoin como forma de pago alternativa.

“Veo que varias personas se quieren adaptar a este cambio porque es algo bueno en realidad. (Pero) que nuestro portafolio quede abierto para inversión en bitcoin, no quiere decir que tengamos un proyecto que especialmente se vaya a vender al 100% en bitcoin”, mencionó Figueroa.

No es la primera vez que un proyecto enciende las alarmas de los reguladores en las últimas semanas. La plataforma Mexo comenzó a operar en junio MMXN, la primera stablecoin vinculada al peso, mientras que el empresario Ricardo Salinas Pliego afirmó que Banco Azteca ya trabaja en la integración de bitcoin en sus operaciones.

“Si están llamando mucho la atención los van a investigar. Ellos están viendo una laguna fiscal que están aprovechando”, señaló Antonio González, CEO de la plataforma Fibraspy.

Desde 2018, la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera establece que Banxico determinará las entidades que puedan realizar operaciones como la compra, venta y almacenamiento de criptomonedas, algo que no ha sucedido hasta el momento.

¿Cómo se hizo la transacción?

La transacción se realizó a través de la plataforma Bitso, en la que George Goodman, fundador de Xifra, realizó el depósito a la cuenta bancaria de la empresa, que recibió la criptomoneda a través de una Sociedad Anónima Promotora de Inversión de Capital Variable (Sapi), donde se canjea por dinero y se manda al fideicomiso.

EL CEO solicitó detalles de la operación a Bitso, pero hasta el momento de esta publicación la compañía no dio respuesta.

El contrato especifica que gran parte del valor del departamento será cubierto en pesos mexicanos. El cliente realizará 18 pagos de más de 111,000 pesos y un pago final a contraescritura de 1.5 millones.

Figueroa explicó que el monto del enganche fue congelado en la plataforma, pero dadas las condiciones de volatilidad del precio del bitcoin, la desarrolladora aceptará los riesgos de una pérdida de su valor al momento del cierre de la venta.

Ellos le están apostando a ganar dinero con bitcoin. Lo veo como una desventaja, porque qué pasa si el día de mañana se cae el precio, si tienen pasivos y deuda ya no tendría ni book value, es decir patrimonio neto positivo

dijo González

Con los días contados

Fibra GDL es un fideicomiso de inversión en bienes raíces privado, sin embargo, estas empresas tienen los días contados.

El 31 de diciembre de este año dejarán de existir las fibras privadas, de acuerdo con lo estipulado en la reforma a la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) que efectuó en 2019 el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, que en su momento argumentó falta de transparencia al momento de realizar actos de fiscalización.

“Había varias lagunas fiscales que hacían que las fibras privadas no pagaran impuestos casi nunca. Si el 31 de diciembre que es la fecha límite para las fibras privadas para hacerse fideicomisos inmobiliarios no cumplen, seguramente van a tener multas”, indicó González.

Según lo establecido en los artículos 187 y 188 de la Ley del ISR, uno de los beneficios que tienen las fibras —públicas y privadas-— es que están exentos del pago del ISR, siempre y cuando cumplan con una serie de requisitos como distribuir a sus tenedores de certificados bursátiles fiduciarios 95% de su resultado fiscal anual.

Ante ello, Figueroa dijo que la integración de las criptomonedas a su portafolio es una manera para acelerar su llegada al mercado de valores. En la actualidad hay 17 fibras listadas en la bolsa y el debut más reciente se produjo en febrero de este año en la Bolsa Institucional de Valores (Biva), con la llegada de Fibra SOMA, de Grupo Sordo Madaleno.

En septiembre, Agrofibra se estrenará como el primer fideicomiso de inversión en bienes raíces enfocado en el sector agroalimentario, a través de una Oferta Pública Inicial (OPI) en Biva.