World Chess, la empresa encargada de la transmisión de los campeonatos mundiales de ajedrez, quiere cotizar en la bolsa, pero no llegará de la manera tradicional: realizará una novedosa estrategia híbrida que incluye la emisión de tókens digitales.
Con los recursos obtenidos de esa oferta inicial de monedas (ICO, por sus siglas en inglés), la empresa financiará los preparativos para realizar su oferta pública inicial y comenzar a cotizar en el Alternative Investment Market (AMI) de Londres el próximo año.
“Nos permitirá prepararnos para el listado público y es una manera más simple de captar inversionistas sin tener que pasar por el relativamente complicado procedimiento de vender participaciones accionarias”, dijo Ilya Merenzon, CEO de World Chess, al Financial Times.
Los tókens, con un valor de cientos de dólares, son una representación digital de la participación accionaria que emplean la tecnología de blockhain y podrán ser intercambiados por acciones cuando la empresa debute en bolsa.
Entre 4 y 6% del total de la empresa será ofertado por esta vía a inversionistas calificados de Estados Unidos y la Unión Europea, detalló Merenzon.
Securitize será la empresa encargada de verificar que los posibles compradores cumplan con las regulaciones aplicables y no traten de lavar dinero u otras prácticas ilegales al participar.
Algorand, una especialista en blockchain que estuvo en la lista de posibles adquisiciones de Facebook, proporcionará la tecnología para llevar a cabo la ICO.
Aunque el ajedrez puede presumir de tener millones de fanáticos en todo el mundo, no ha logrado modernizarse, explica el diario británico, y durante décadas ha dependido financieramente de donadores de Rusia y algunas exrepúblicas soviéticas.
Según World Chess, los recursos que obtenga con su oferta pública inicial en la bolsa de valores se destinarán a impulsar al ajedrez en el mundo de los e-Sports, incluyendo el desarrollo de una plataforma de juego en línea con software de monitoreo para evitar trampas.
ICO, una opción arriesgada
En años recientes, los inversionistas se han visto afectados por ofertas iniciales de monedas en las que terminaron con tókens sin valor.
Ante estos casos, muchos de los cuales estaban estructurados para evadir las leyes del mercado de valores, los reguladores han tratado de frenar las ICO. En 2017, la Autoridad de Conducta Financiera del Reino Unido emitió una advertencia de que estas ofertas eran “inversiones especulativas de muy alto riesgo” con potencial de ser fraudes.
Ante ello, muchas empresas han comenzado a explorar nuevas formas de obtener recursos sin pasar por los canales tradicionales, por ejemplo, con la pre-oferta pública inicial que significa la ICO de World Chess.
“Es una innovación financiera pionera y, creo, que muchas empresas la usarán para recaudar fondos en el futuro”, afirmó Merenzon.