Los cuestionamientos sobre la calidad de préstamos de Crédito Real van en aumento, en medio del deterioro de activos de su cartera de créditos comerciales, lo que ha generado temores entre los inversionistas.

A finales de abril, Crédito Real dio a conocer ajustes al balance financiero anual de 2020. Desde entonces, sus acciones acumulan una caída de 25%, de acuerdo con datos de Investing.com.

Los títulos de la Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom) cerraron el miércoles a un precio de 7.37 pesos, apenas 13 centavos por encima del mínimo histórico de 7.24 pesos que registró la semana pasada. Los 500 millones de dólares en bonos de Crédito Real con vencimiento en 2028 cayeron a la par con las acciones.

En una presentación enviada el 24 de abril a la Bolsa Mexicana de Valores, Crédito Real reportó que su cartera vencida es aproximadamente el doble a lo que presentó a finales del año pasado, con lo que se sitúa en 3.3%.

La tasa de morosidad aumentó a 3.9%, de acuerdo con sus resultados del primer trimestre, apenas por debajo del umbral 4%, el máximo permitido en los convenios de sus préstamos bancarios más restrictivos.

En la llamada con inversionistas realizada el 29 de abril, los asistentes presionaron a la dirección para brindar mayores detalles sobre las inconsistencias. La empresa reveló que un único cliente fue el principal responsable del alza del índice de cartera vencida.

El director ejecutivo de Crédito Real, Carlos Ochoa, minimizó el ajuste de los resultados durante la conferencia y dijo que el índice de morosidad caerá a 3% a finales del año, según Bloomberg. 

La situación encendió los focos rojos ante la posibilidad de que Crédito Real reportara tasas de morosidad más bajas en estados financieros pasados.

En mi experiencia, cuando la cartera vencida de una institución financiera presenta un incremento notoriamente atípico, las áreas de Fraude y de Compliance deberán analizar la posibilidad de que exista un fraude interno y, tal vez, una Operación Interna Preocupante

explicó a EL CEO Salvador Mejía, socio de Asimetrics

Subrayó que la colocación de créditos por parte de las áreas comerciales sin atención a la ley, a los riesgos y a las políticas internas no es algo inusual, que incluso suele ser alentado por la alta dirección debido al desmedido apetito del riesgo.

“Una cartera vencida que rompe los parámetros es, y será, una señal de alerta”, dijo. 

Reservas en banca ayudaron a enfrentar aumento de la morosidad

Le bajan calificación crediticia

La semana pasada, la agencia S&P recortó la calificación de Crédito Real en escala global a ‘BB-‘ desde ‘BB’, aunado a los resultados débiles de 2020 que continuarán afectando la capacidad de la compañía para generar capital interno.

Aun así mantuvo una perspectiva estable para los próximos seis meses, bajo las expectativas de que las métricas sobre calidad de activos se estabilizarán y sus líneas de crédito serán refinanciadas, lo que asegurará suficiente cobertura frente a sus obligaciones financieras de corto plazo.

Pese al deterioro de sus activos, Crédito Real renovó dos líneas de crédito con BBVA y Mifel la semana pasada, sumándose a las dos líneas de crédito con Multiva y Santander, que en conjunto superan los 1,000 millones de pesos.

Las instituciones financieras que le prestan a Crédito Real siguen teniendo confianza en la empresa (…) (Crédito Real) tiene que mejorar la calidad crediticia, pero tiene la capacidad para solventar esta crisis

comentó Jacobo Rodríguez, director de análisis financiero de Black WallStreet Capital

No es la primera vez que el sector se ve afectado por problemas contables. A inicios de este año, Crédito Real compró la cartera de nómina de 11,000 millones de pesos de Grupo Famsa.

Famsa solicitó el año pasado protección por bancarrota en México y Estados Unidos luego de que su banco fue liquidado por malas prácticas. Banco Ahorro Famsa evadía la regulación de las consideraciones contables de la cartera de crédito y de las reservas crediticias, además de entregar información falsa del índice de capitalización.

AlphaCredit, el otro caso

Días antes del ajuste de resultados de Crédito Real, AlphaCredit halló errores en su contabilidad, por lo que la fintech mexicana reformulará sus estados financieros de 2019 y 2018.

La empresa estima que las modificaciones contables causarán un deterioro de hasta 4,100 millones de pesos de otros activos y cuentas por cobrar en su balance general al 30 de septiembre de 2020.

“La compañía ha determinado que una reexpresión era necesaria con base en una revisión interna y pláticas con KPMG, su actual auditor contable, así como con Deloitte, su anterior firma contable por los años concluidos en diciembre 31 de 2019, diciembre 31 de 2018, y anteriores”, dijo en un comunicado.

Las calificadoras S&P, Moody’s y Fitch recortaron la nota de AlphaCredit, señalando deficiencias en el gobierno corporativo de la empresa.

El periodista Darío Celis publicó en su columna del 18 de mayo en El Financiero que AlphaCredit contrató a despachos y consultores financieros que la asesoren para acogerse a la protección contra la bancarrota bajo la figura del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras en Estados Unidos.

EL CEO solicitó detalles a AlphaCredit sobre los errores contables y la petición de protección por bancarrota, pero la empresa declinó hacer comentarios.

AlphaCredit cuenta con 393,000 clientes en la actualidad y ha otorgado más de 785,000 créditos, por un monto superior a 10,000 millones de pesos.

La fintech obtuvo inversiones por 1,900 millones de dólares desde su fundación en 2011, respaldada por SoftBank, Morgan Stanley y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).