El oro y la plata, metales preciosos que son considerados activos de refugio en tiempos de incertidumbre, acumulan rendimientos en los primeros meses de 2023, a medida que se acerca el fin del ciclo alcista en las tasas de interés.
Al menos existen dos alternativas para acceder a inversiones en oro y plata: a través de monedas físicas o al comprar un Fondo Cotizado en Bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) ligado a los metales.
El centenario de oro y la onza libertad de plata son las monedas más usadas en México para tener exposición a los metales, sin embargo, hay contrastes en su desempeño por la apreciación del peso mexicano.
La moneda 50 pesos oro (centenario) presenta un alza de apenas 0.65% en el año, mientras que el metal dorado sube 10.72%, de acuerdo con datos de Bloomberg, al 11 de mayo.
El caso de la onza libertad es más llamativo, con una disminución de 8.02% en su precio, en tanto que la plata da un retorno de 1.66% en el mercado de futuros.
Durante el mismo lapso, el peso se ha apreciado 9.5% contra el dólar y es una de las divisas más fuertes en el mundo gracias a la lucha de Banco de México (Banxico) contra la inflación con los aumentos a la tasa de referencia.
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Principales ETFs de oro y plata dan ganancias
Los ETFs son otra opción para acceder al oro y la plata porque replican el precio del activo y son tan líquidos como una acción al estar listados en las bolsas de valores.
Entre la gran variedad de ETFs disponibles en los mercados financieros, el iShares Gold Trust (IAU) y el iShares Silver Trust (SLV) son los fondos de oro y plata, respectivamente, más operados en los mercados.
Ambos ETF tienen rendimientos similares a los de los metales que replican en 2023. En el caso del IAU este es de 10.52% y para el SLV es de 1.04%.
La plata presentó un ajuste de más de 4% en la jornada de este jueves por datos de inflación en Estados Unidos mejores a los estimados, luego de que a principios de mayo el metal tocó su nivel más alto desde marzo del año pasado.
Es una idea general que el oro y la plata sirven como cobertura ante la inflación. Si la inflación baja más rápido de lo que el mercado estaba esperando, pega a estos activos
dijo Luis Gonzali, director de inversiones en Franklin Templeton.
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¿Monedas o ETFs?
La tesis de inversión de una persona que desea tener exposición al oro y la plata definirá el tipo de instrumento que utilizará, dependiendo de sus objetivos.
En el contexto actual, las inversiones en moneda física convienen en un plazo mayor a un año. Si el inversionista busca una mayor rentabilidad en menos tiempo, optaría por un ETF
mencionó Guillermo Guzmán, CEO de Trading Advisor.
Las monedas físicas suelen ser menos accesibles porque los precios son elevados, en comparación con los ETFs, además de que su adquisición puede implicar gastos extra para su resguardo y cuidado.
Si el dueño de la moneda opta por vender su activo en algún momento, debe asegurarse de que no presente un desgaste o un daño severo que haga que pierda valor.
Castigo de bancos, otro punto a considerar
El precio de venta de una moneda física en un banco es menor al precio de compra, un diferencial que alarga el periodo en el que una persona puede obtener rendimientos sobre su inversión.
De hecho, esta situación es más evidente en el caso del centenario y en menor medida con la onza libertad, aunque depende de los precios que fija cada institución financiera.
Los bancos que las compran generalmente aplican un castigo de entre 20% y 25%
comentó Gonzali.
Por ejemplo, el diferencial para el centenario en Citibanamex es de 20,000 pesos, pues se vende en 44,500 y se compra en 24,500, mientras que en Banorte es de 11,500 pesos, al tener un precio de venta establecido en 47,000 y el de compra en 36,500.
