El presidente Donald Trump podría extender el plazo establecido para negociar un acuerdo comercial con China más allá del 1 de marzo.
“Si estamos cerca de un acuerdo … podría permitirme recorrerlo un poco”, señaló Trump este martes en la Casa Blanca, pero agregó: “en términos generales, no estoy dispuesto a eso”.
Las declaraciones del mandatario se divulgaron al inicio de la tercera ronda de negociaciones bilaterales de esta semana en Pekín para evitar que el 1 de marzo se aplique un aumento de 10 a 25% a los aranceles estadounidenses impuestos a bienes chinos por un valor de 200,000 millones de dólares.
“China quiere hacer necesariamente un acuerdo” y las “cosas marchan bien” en las conversaciones, dijo Trump. Y aunque no hay fecha pensada, afirmó que espera reunirse “en algún momento” con el presidente chino, Xi Jinping.
La disputa comercial entre las mayores potencias del planeta genera el temor de que termine perjudicado el comercio mundial, luego de que Trump impuso el año pasado aranceles de 25% a bienes chinos por 50,000 millones de dólares y de 10% para otros artículos importados por 200,000 millones.
La economía de China ya muestra señales de menor crecimiento mientras que en Estados Unidos la guerra comercial dañó la confianza de las empresas. Los aranceles de represalia que impuso Pekín han hecho incrementar costos y perder competitividad a las empresas estadounidenses.
Pero además, la agresiva estrategia comercial de Trump no ha conseguido abatir sustancialmente el déficit comercial bilateral, principal objetivo del presidente.
Reiteradamente, Trump ha dicho que China es la que paga los costos de los aranceles siendo que, en realidad, esa carga termina cayendo sobre las empresas importadoras estadounidenses.
Economistas apuntaron que buena parte del efecto de aplicar aranceles para reducir importaciones se ha sido compensado con la devaluación de la moneda china que hace que sus productos sean más baratos para los importadores.
Con información de AFP