El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, dijo este martes que acordó con el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) el aplazamiento de los Juegos de Tokio por cerca de un año.

Abe habló con los medios tras la conversación telefónica que mantuvo con el jefe del COI, Thomas Bach, sobre el aplazamiento de Tokio 2020, originalmente agendado del 24 de julio al 9 de agosto, en medio de una creciente preocupación por la pandemia del coronavirus.

“Pedimos al presidente Bach que considerara el aplazamiento en cerca de un año para hacer posible que los deportistas participen en las mejores condiciones y para conseguir que el evento sea seguro para los espectadores”, dijo Abe.

“El presidente Bach dijo que estaba de acuerdo en un 100%”, agregó”.

Tokio había completado los preparativos para los Juegos cuando el virus empezó a propagarse por el mundo. Pese a insistir durante semanas en que se celebrarían tal y como estaba previsto, Abe dijo esta semana que podría ser inevitable una postergación si la cita deportiva mundial no se podía celebrar de forma completa.

La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, dijo por separado a los medios que los Juegos, que se celebrarán en el verano de 2021, seguirán llamándose “Tokio 2020”. 

Medida inédita

Los Juegos Olímpicos nunca han sido pospuestos, aunque sí fueron cancelados en 1916, 1940 y 1944, durante las Guerras Mundiales, y hubo importantes boicots en tiempos de la Guerra Fría en Moscú 1980 y Los Ángeles 1984.

Previo al anuncio de Abe, Canadá y Australia anunciaron que no participarían en los Juegos si no se celebraban en 2021.

Los atletas paralímpicos son considerados un riesgo especial por la epidemia, ya que algunos tienen problemas de salud preexistentes. Más de 14,600 personas han muerto a nivel global por el coronavirus y hay más de 334,000 contagiados.

“Unos Juegos Olímpicos en julio de este año no son factibles ni deseables”, dijo el jefe del atletismo mundial, Sebastian Coe, el lunes. “Se lo debemos a nuestros atletas, darles un respeto si podemos”.