Europa podría enfrentar una crisis energética aún más aguda el próximo año después de vaciar sus tanques de gas natural para soportar el frío de este invierno, dijo el miércoles el jefe de la Agencia Internacional de Energía, mientras la UE busca formas de aliviar la crisis.

Los países europeos han llenado los tanques de almacenamiento a alrededor del 90% de su capacidad después de que Rusia cortó el suministro de gas en respuesta a las sanciones occidentales impuestas por la invasión a Ucrania.

Sin embargo, los precios de la gasolina, que subieron en los meses posteriores a la invasión en febrero, han retrocedido. Pero eso podría durar poco, ya que los países compiten para comprar gas natural licuado (GNL) y otras alternativas a las entregas de gasoductos rusos.

Para ayudar a lidiar con la situación, la Unión Europea está considerando un tope en el precio de la gasolina, un asunto que ha dividido al bloque de 27 naciones, ya que algunos países temen que podría dificultar la obtención de suministros.

 Con almacenamientos de gas de casi el 90%, Europa sobrevivirá el próximo invierno con solo algunos golpes, siempre que no haya sorpresas políticas o técnicas

dijo Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE con sede en París.

Invierno dejaría sin gas a la UE

Los verdaderos desafíos a los que se enfrenta Europa, que históricamente ha dependido de Rusia para obtener alrededor del 40 % de su gas natural, comenzarán en febrero o marzo, cuando sea necesario volver a llenar el almacenamiento después de que la alta demanda invernal lo haya reducido al 25%-30%.

 Este invierno es difícil, pero el próximo invierno también puede ser muy difícil

 dijo Birol a los periodistas en Finlandia.

Los gobiernos europeos se han movido para proteger a los consumidores del impacto de los precios más altosAlemania dijo que subsidiará las facturas de energía el próximo año pagando poco menos de 13,000 millones de euros (12,800 millones de dólares) por las tarifas de uso cobradas por las cuatro redes de transmisión de alto voltaje (empresas TSO).

En ese sentido, las tarifas forman parte de la factura de la luz, representando alrededor del 10% de los costes totales para los clientes minoristas y un tercio para las empresas industriales de sectores como el siderúrgico o el químico.

La intervención de Berlín estabiliza las tarifas, que de otro modo se habrían triplicado debido a los precios de energía al por mayor desbocados y los crecientes costos operativos para los TSO, dijo el ministro de economía de Alemania, Robert Habeck.

Hasta que estalló la crisis de Ucrania a fines de febrero, el gasoducto Nord Stream 1 debajo del mar Báltico desde Rusia hasta Alemania era una de las principales fuentes de gas de Europa occidental.

Tres de las cuatro líneas han sido deshabilitadas por lo que Occidente y Rusia dicen que fue un sabotaje que causó grandes fugas  mientras que las autoridades danesas dijeron que la cuarta estaba siendo despresurizada el martes.

Tensiones en el mercado del gas

Las tensiones en el mercado del gas habían disminuido cuando la compañía energética rusa Gazprom reanudó el miércoles las exportaciones de gas a Italia a través de Austria después de resolver un problema sobre las garantías que había llevado a la suspensión de los flujos durante el fin de semana.

Sin embargo, el viceprimer ministro Alexander Novak dijo el miércoles que Rusia podría reducir la producción de petróleo para compensar los efectos negativos de los límites de precios impuestos por Occidente sobre las acciones de Moscú en Ucrania.

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El plan de tope de precios acordado por el Grupo de los Siete países ricos exige que los países participantes nieguen seguros, finanzas, corretaje, navegación y otros servicios a los cargamentos de petróleo con un precio superior a un precio tope aún por determinar en crudo y productos derivados del petróleo.

Con información de Reuters