El Congreso de Estados Unidos adoptó este jueves in extremis una extensión presupuestal que evita la parálisis de los servicios públicos federales, el denominado cierre del gobierno.
Por 254 votos a 175, la Cámara de Representantes aprobó una ley enviada por el Senado que prolonga el actual presupuesto hasta el 3 de diciembre.
El presidente Joe Biden deberá promulgar el texto antes de medianoche para evitar un corte abrupto del dinero a los servicios federales.
“Este es un buen resultado, del cual estoy feliz”, expresó el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, antes de la votación en la cámara alta.
Con las dificultades que enfrenta el presidente Biden para aprobar sus megaproyectos de gastos sociales e infraestructura y el potencial incumplimiento de obligaciones por parte de Estados Unidos si el Legislativo no aumenta o suspende el techo de la deuda, el cierre o “shutdown” del gobierno era el menor de los problemas.
Tiempo limitado
Los legisladores deben ahora aumentar antes del 18 de octubre la capacidad de endeudamiento del país si quieren evitar el primer default en la historia de la mayor potencia económica mundial.
“El tiempo es limitado, el peligro es real”, remarcó Chuck Schumer el jueves.
Los republicanos rechazan suspender el límite de emisión de deuda, pues consideran que sería un cheque en blanco para el gobierno de Biden.
Por eso dejaron la decisión en manos de los demócratas, que deberán apelar a sus propios votos para aprobar esta medida a través de una maniobra parlamentaria que podría tomar tiempo.
La Cámara de Representantes aprobó por su parte el miércoles un texto que prevé suspender el techo de la deuda hasta diciembre de 2022, pero sin apoyo republicano en el Senado la iniciativa nació muerta.