El presidente de China, Xi Jinping, dijo ante la Asamblea de Naciones Unidas que Pekín no tiene “intención de pelear ni una guerra fría ni una guerra abierta contra ningún país”, en momentos en los que se agrava el conflicto entre su nación y Estados Unidos.

Seguiremos reduciendo las diferencias y resolviendo las disputas con otros a través del diálogo y la negociación,

aseguró Xi.

“No buscaremos un desarrollo sólo de nosotros ni nos embarcaremos en un juego de suma cero”, declaró el mandatario en un comunicado pregrabado para la reunión de líderes anual de líderes mundiales

Por el contrario, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, utilizó la Asamblea de la ONU para criticar el manejo de China de la pandemia de coronavirus, al decir que el gigante asiático debe rendir cuentas por la propagación del COVID-19.

Los líderes de las dos economías más grandes del mundo expusieron una vez más sus visiones, en un momento en que las relaciones bilaterales se encuentran en su peor nivel en décadas luego de que la pandemia profundizó el quiebre expuesto por las disputas sobre comercio y tecnología.

Trump, que buscará la reelección en noviembre mientras Estados Unidos lidia con el mayor número oficial de muertes e infecciones por coronavirus en el mundo, centró su discurso en los ataques a China.

Debemos responsabilizar a la nación que desató esta plaga en el mundo: China,

dijo Trump en declaraciones grabadas y entregadas de forma remota a la Asamblea General.

“El gobierno chino, y la Organización Mundial de la Salud -que virtualmente está controlada por China- declararon falsamente que no había evidencia de transmisión entre humanos. Después, dijeron con falsedad que las personas sin síntomas no propagarían la enfermedad (…) Naciones Unidas debe responsabilizar a China por sus acciones”, agregó Trump.

China se defiende

El embajador chino en la ONU, Zhang Jun, dijo que Pekín “rechaza resueltamente las acusaciones infundadas contra China”.

“El mundo está en una encrucijada. En este momento, el mundo necesita más solidaridad y cooperación, no confrontación”, sostuvo.

En lo que pareció una crítica implícita, Xi pidió en su discurso una respuesta global al coronavirus y entregó todo su respaldo a la OMS, entidad que Trump prometió que Estados Unidos abandonará.

En la lucha contra el virus debemos fortalecer la solidaridad y superar esto juntos. Debemos seguir las directrices de la ciencia, dar un rol central al liderazgo de la Organización Mundial de la Salud y lanzar una respuesta internacional conjunta para combatir esta pandemia, 

indicó Xi.

OMS rechaza comentarios de Trump

“Ningún gobierno nos controla”, dijo la directora de comunicaciones de la ONU, Gabby Stern, en un tuit, y agregó: “Desde febrero, nuestros expertos han abordado públicamente la transmisión de personas sin síntomas o antes de los síntomas”.

Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, dijo a la Asamblea General que la OMS debería fortalecerse para coordinar la respuesta global a la pandemia y propuso una conferencia de alto nivel sobre cooperación en materia de vacunas.

Con información de Reuters