Los demócratas de la Cámara de Representantes presentaron este martes los dos cargos con los que acusan a Donald Trump y con los cuales buscan iniciar su proceso de destitución. 

El primer cargo: abuso de poder

Trump es acusado de abusar del poder de su cargo al pedirle al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que investigara a Joe Biden, su potencial rival demócrata en las elecciones presidenciales de 2020, condicionando la entrega de ayuda militar.   

“Es un delito merecedor de juicio político que el presidente ejerza los poderes de su cargo público para obtener un beneficio personal inapropiado mientras ignora o daña el interés nacional”, dijo el presidente del Comité Judicial, Jerry Nadler. 

Eso es exactamente lo que hizo el presidente Trump cuando solicitó y presionó a Ucrania para que interfiriera en nuestras elecciones presidenciales de 2020,

agregó. 

En tanto, el presidente del Comité de Inteligencia, Adam Schiff consideró que puso en riesgo la seguridad de EU. 

“Abusó del poder de su cargo al condicionar dos actos oficiales para que Ucrania lo ayudara a ser reelecto: la entrega de cientos de millones de dólares en ayuda militar que la nación necesitaba desesperadamente, y una reunión de la Casa Blanca con un aliado que intentaba defenderse de la agresión rusa”. 

Al hacerlo, socavó nuestra seguridad nacional y la integridad de nuestras próximas elecciones,

afirmó Schiff. 

El segundo cargo: obstrucción del Congreso 

Los legisladores señalaron a Trump de intentar bloquear los esfuerzos del Congreso de investigar sus acciones, lo que para ellos es una violación de la Constitución, que le otorga al legislativo un mandato de supervisión del poder ejecutivo. 

“El presidente Trump realizó un desafío sin precedentes, categórico e indiscriminado de la investigación de juicio político”, dijo Nadler.

El informe del Comité de Inteligencia acusa a Trump de ordenar a las dependencias públicas y a funcionarios federales que ignoraran las solicitudes para la presentación voluntaria de documentos y que no acataran las citaciones para suministrar registros. 

Trump indicó a los funcionarios del gobierno federal no testificar “incluso cuando estén obligados”, señaló el Comité.

“Un presidente que se declara por encima de la rendición de cuentas, por encima del pueblo estadounidense y por encima del poder de juicio político del Congreso… es un presidente que se ve a sí mismo por encima de la ley”, agregó Nadler.

Debemos ser claros, nadie, ni siquiera el presidente, está por encima de la ley,

agregó.

Trump responde

Tras la publicación de las acusaciones, Trump consideró que ambas son “ridículas”. 

A lo largo del proceso, el mandatario se ha referido a este como una “caza de brujas” y dijo al presidente del Comité Judicial, Jerry Nadler, que las acusaciones no son verdaderas.

¿Qué sigue?

Si la Cámara de Representantes, con mayoría demócrata, vota a favor de destituir a Trump, el republicano se convertiría en el tercer presidente estadounidense en ser sometido a un juicio político.

El primer presidente fue Andrew Johnson, en 1868, y Bill Clinton, en 1997. Ninguno de ellos fue removido del cargo.

Los cargos se someterán a votación en el Comité Judicial de la Cámara de Representantes y si se aprueban, se presentarán al pleno de la Cámara baja de 435 miembros.

No obstante, en caso de que la Cámara Baja vote a favor de iniciar el juicio, este podría no prosperar debido a que el Senado tiene mayoría republicana.

En la Cámara Alta los republicanos actualmente detentan 53 escaños frente a los 47 de los demócratas. La Constitución estadounidense requiere una mayoría calificada de dos tercios para condenar a una persona que ha sido acusada.

 Según las estimaciones con el actual calendario legislativo, el proceso en el Senado podría desarrollarse en enero.

Con información de AFP