Los aranceles que Estados Unidos impuso al tomate mexicano este martes podrían significar un impacto de 350 mdd anuales para los productores. Sin embargo, todavía existen tres instancias que podrían devolverles las cuotas compensatorias, incluso con intereses.

La primera es la consecución de un compromiso entre las instancias de ambos países para firmar un nuevo acuerdo de suspensión.

Los actuales aranceles son consecuencia de una falla en las negociaciones durante el último año, pues no se han podido establecer satisfactoriamente reglas sobre precios de venta y medidas de supervisión.

Desde finales de 2017, el equipo negociador empezamos a tocar la puerta del departamento de comercio (de EU) porque veíamos venir que en marzo de 2018 se vencía el acuerdo. No nos hicieron mucho caso y seguimos insistiendo con propuestas todo el año pasado. En febrero de este año se nos anunció que se saldrían del acuerdo

Alfredo Díaz Belmontes, Director General de AHMPAC

Díaz Belmontes reveló que la semana pasada el Departamento de Comercio estadounidense dio muestras de querer negociar, pues a nadie conviene operar sin acuerdos. Esto mantiene optimistas a la AHMPAC sobre la posibilidad de terminar con los aranceles en la mesa de negociación.

Mientras tanto, la salida del acuerdo llevó a que el Departamento de Comercio estadounidense reabriera su investigación de dumping del tomate mexicano, la cual fue detenida con la firma del primer acuerdo en 1996. Esta investigación tiene como fecha límite el 19 de septiembre; sus conclusiones podrían aumentar, disminuir o incluso eliminar los aranceles.

Además existe un proceso abierto ante la International Trade Commission, un organismo independiente encargado de dirimir este tipo de controversias. Los tomateros mexicanos ya tuvieron una audiencia dentro de este proceso, donde la parte mexicana y la parte de Florida presentaron argumentos. La fecha final para el dictamen es el 3 de noviembre próximo.

Pueden presentarse dos escenarios: si le hicimos daño a la industria doméstica de EU, entonces se ratifica la cuota compensatoria determinada por el Departamento de Comercio. Si se concluye que el daño a la industria no es imputable al tomate mexicano, se determina la eliminación de este arancel y volvemos al mercado libre(…) La idea es que no lleguemos a estas instancias, pero si lo hacemos tenemos confianza, porque tenemos los elementos para pensar que el ITC nos va a dar la razón. Hemos sido cuidadosos con los compromisos contraídos en el pasado acuerdo y tenemos cómo demostrarlo

Alfredo Díaz Belmontes, Director General de AHMPAC

La ‘variable política’

José Antonio Seade Kuri, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores, consideró los aranceles como ‘un hecho lamentable’ y explicó que se trata de un tema electoral impulsado por Marco Rubio.

Rubio es senador por el estado de Florida, uno de los más importantes para el partido Republicano en las próximas elecciones presidenciales de 2020. En febrero de este año, lideró a un grupo de legisladores que enviaron una carta a Donald Trump para pedir que se revisara la suspensión a la investigación de dumping del tomate mexicano.

Las asociaciones de productores también creen que los intereses políticos agregan una arista más al problema y complican su resolución.

No puede haber cosa más impredecible que la variable política. Si la desestimamos yo te diría que hay un 80% (de probabilidad de llegar a un acuerdo con el Departamento de Comercio de EU). Pero con la variable política… sabrá Dios

Alfredo Díaz Belmontes, Director General de AHMPAC