Las autoridades federales tienen la obligación de otorgar recursos a los estados mediante el reparto de participaciones federales y a su vez, estas entidades otorgan recursos a los municipios.
El reparto de las participaciones depende del tamaño de la población y de la recaudación federal participable, la cual se define por la actividad económica y petrolera de cada entidad.
Por lo tanto, las bajas participaciones representan un menor nivel recaudatorio que deriva de un débil sistema tributario y desaceleración en la actividad económica.
Durante 2023, las participaciones federales ascendieron a 1.15 billones de pesos, lo que significó un incremento anual real de 2.5%, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Los estados más beneficiados en el reparto de participaciones federales
El Estado de México recibió un total de 150,707 millones de pesos (mdp), según la institución encabezada por Rogelio Ramírez de la O, gracias a los beneficios por concepto de remesas.
La segunda y tercera posición fue para la Ciudad de México y Jalisco con 112,634 y 76,835 mdp, respectivamente.
En la parte alta también se ubican entidades como Veracruz, Nuevo León, Puebla y Guanajuato, todos con cifras por encima de los 50,000 mdp.
Tanto Jalisco como Nuevo León se han quejado porque no se otorgan mayores recursos a las economías más grandes.
Asimismo, Quintana Roo se posicionó como el estado con mayor aumento en participaciones federales en 2023 respecto a 2022, con una variación de 22.7%.
Otras entidades que incrementaron su cambio a doble dígito fueron Durango, 18.1%; Campeche, 16.5%; Baja California Sur, 13.2%; Querétaro, 11.8%; y Tlaxcala, 10.2%.
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